• Pescadores causaron daños al casco de una lancha del Guardacostas.
Redacción- Cada vez son más las personas que irrespetan a las autoridades que realizan su trabajo. Ahora un grupo de pescadores que irrespetaban la veda en el Golfo de Nicoya, agredieron a oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas que les llamaban la atención.
El director del Servicio Nacional de Guardacostas, Martín Arias Araya, indicó que el hecho tuvo lugar en las cercanías de Isla Bejuco.
«En ese sitio los guardacostas detectaron a gran cantidad de pescadores que estaban usando la técnica de encierro o cerco, una práctica que destruye el ambiente y atenta contra la sostenibilidad de la actividad pesquera. Con esa técnica se ve perjudicada la mayoría de pescadores respetuosos de la ley, mientras que solo beneficia a unos pocos infractores de la legislación pesquera y ambiental»; dijo Arias.
Dichos pescadores también lanzaron plomos con resorteras, causándo fracturas al acrílico (parabrisas) de la embarcación 32-9 de la Estación de Guardacostas de Puerto Níspero.
Otra práctica que utilizaron estos infractores fue el uso de sus propias lanchas como armas para atentar contra las autoridades, lo cual colisionaron una de las embarcaciones pesqueras, de nombre Nelsy A, contra la lancha 32-9 del Guardacostas.
Como consecuencia de este temerario acto, el casco de la nave de los infractores se dañó, tras lo cual se hundió.
El jefe policial indicó que los guardacostas no lograron recoger los artes de pesca de los infractores, ya que al sitio se hicieron presentes gran cantidad de pescadores, los cuales impidieron que las autoridades retiraran cerca de un kilómetro de trasmallos ilegales.
Los oficiales se vieron obligados a realizar disparos de advertencia dirigidos al agua, pero no contra los sospechosos de pesca ilegal.
Los pescadores incluso estaban armados con bombas incendiarias de las conocidas como cocteles molotov, las cuales intentaron usar contra los oficiales.