Por: Ing. Rogis Bermúdez,Expresidente del Consejo Nacional de Producción
El 16 de octubre se celebra el día mundial de la alimentación y nosotros como agricultores no debemos dejar pasar por alto tan importante fecha para hacer algunas observaciones sobre los riesgos y amenazas que hay para poder seguir cumpliendo con el objetivo de abastecer el mercado con producto un inocuo, de las mejores condiciones y a un precio accesible.
¿Pero como está el panorama, tanto nacional como mundial? ¿Es realmente una celebración o una fecha para reflexionar?
Para quienes conocemos la dinámica del sector agropecuario sabemos que cada 4 años hay crisis y cambios en la políƟca de atención al sector productor. Hemos pasado dificultades, tanto a lo interno del sector, con la rectoría, con los intermediarios y otro sin fin de factores, pero también hemos tenido lapsos de mediana tranquilidad y de esfuerzos para al menos no retroceder en algunos temas y recuperar en otros.
Estos lapsos de mediana tranquilidad han permitido fortalecer instituciones y programas de atención al productor por medio de recursos para equipamiento, valor agregado, mercados, infraestructura, entre otros. Pero veamos algo de estadística.
En 2022 el área de arroz sembrado fue de aproximadamente 37 000 hectáreas y con un leve aumento en frijol, pero para 2023 ya los números son muy diferentes, Conarroz reporta una disminución considerable en las áreas sembradas, fueron unas 24 000 hectáreas y para la que viene en definitiva se disminuirá aún más.
Según datos del mismo Conarroz, en octubre del 2022 la tonelada métrica de arroz en Brasil tenía un precio FOB de $300 (trescientos dólares americanos), mientras que para setiembre del 2023 el precio estaba en $415 (cuatrocientos quince dólares americanos), $115 (ciento quince dólares americanos) de mas por la misma tonelada de arroz en granza, el precio de Uruguay es de $460, Argentina $450 y Paraguay con $440 /Tm.
El mismo boletín indica que para la cosecha 2021/2022 se registraron 534 productores, para la del 2022/2023 se registraron 421 y para la actual 2023/2024 solo se han registrado 143 productores. Es decir, para la cosecha 2021/2022 la producción nacional representó un 37% del consumo nacional, ya para la cosecha 2022/2023 y con la ruta del arroz establecida el porcentaje bajó a un 25% y este periodo se estima que será un 15.6% como máximo, algo como para olvidar.
Pero por qué es importante el desarrollo de un plan estratégico agropecuario y de seguridad alimentaria basado en la reactivación y fortalecimiento del sector agro?
Cuando se establece una estrategia de producción no se debe ver solo el estado interno, lo primero es ver como está el entorno mundial y valorar los riesgos con la dependencia de algunos productos que no se producen en el país, luego los que se importan, pero si se pueden producir y hay capacidad para suplir el consumo, entre los mas comunes están el arroz, frijoles, maíz, musáceas, raíces y tubérculos y algunas frutas. También se debe analizar los cárnicos, avícolas, lácteos y pescado, entro otros.
Con los datos claros de las necesidades se valoran las capacidades internas y se revisa el entorno mundial para completar la estrategia de seguridad alimentaria que se requiere. Veamos algunos datos publicados recientemente y que nos dan una idea de como anda el escenario mundial y saber si en una medición de riesgo estamos en un nivel de tranquilidad o de preocupación.
El Banco Mundial en su reporte del 18 de seƟembre que para el caso del arroz se ha tenido una subida del 31% en promedio a nivel mundial con respecto al 2021. Por su parte la FAO advierte que para América Latina y el Caribe los impactos de El Niño incluyen retrasos en las siembras, pérdidas de cultivos y problemas en ganadería en varios países de Suramérica y Centroamérica.
El informe SOFI 2023 (estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2023) indica que en 2023 hay 122 millones mas de personas que en 2019 afectadas por el hambre debido a múlƟples crisis, como lo son el clima y los conflictos bélicos.
El informe SOFI es una publicación anual realizada por la FAO, el FIDA, la OMS, el PMA y UNICEF. El informe señala que alrededor del 29.6% de la población mundial, cerca de 2400 millones de personas no Ɵenen acceso a alimentos.
Con estos mínimos datos es suficiente determinar que la situación mundial de alimentos es algo que debe preocuparnos. Estamos a tiempo de para desarrollar una estrategia basada en fortalecimiento del sector productivo interno para minimizar esos impactos que ya vienen afectando el derecho a la alimentación.
Celebraremos el día de la alimentación, pero no sabemos si los alimentos seguirán disponibles en el futuro si hoy no hacemos un cambio en la forma de ponerlos a disposición.
