Redacción. El empresario Humberto Vargas Corrrales, dueño de la sociedad que le vendió a la Sociedad Administradora de Fondos de Inversión del Banco de Costa Rica (BCR-SAFI) el Parque Empresarial del Pacífico (PEP), anunció que presentará una demanda contra este fondo de inversión privado.

Así lo confirmó el propio Vargas, quien durante el 2014 y el 2018, fungió como diputado de la Asamblea Legislativa.

De acuerdo con el empresario, un equipo de abogados trabaja en estos momentos en un documento que enumera una serie de hechos que perjudicaron su reputación y situación financiera debido a actuaciones irregulares de la SAFI.

“En mi caso personal yo recibí una oferta de compra  del parque la acepté y me pagaron con dinero y activos. Esa fue toda mi participación en el negocio. Cuatro años después, un grupo pequeño de inversionistas arma todo un escándalo mediático que me afectó a mi directamente.

Los últimos acontecimientos donde aparecen avalúos dudosos del Parque Empresarial del Pacifico, remates de nuestras garantías de alquileres, movidas para hacernos más cobros indebidos, el desprestigio reputacional a través de medios cómplices de nuestros enemigos es que estaremos presentando una serie de demandas, incluyendo la Safi, el Fondo y algunos de sus propietarios por la vía ordinaria y arbitral para aclarar, a través de autoridades judiciales, todas las dudas e intereses económicos que se mueven alrededor de su destrucción física y mediática”, dijo Humberto Vargas.

Asimismo, señaló que en estas demandas judiciales tienen como objetivo conocer quiénes son los promotores y beneficiarios de todo lo que se ha indicado sobre este caso, el cual cataloga como “un montaje propagandístico y económico en contra el proyecto”.

“Sabremos con nombres y apellidos quienes son las personas y las empresas que han promovido esta farsa para comprar barato el parque y los comisionista de estás ventas. Además aprovechan la situación para aportar al desprestigio del BCR para promover su venta”, puntualizó Vargas.

La polémica en torno al Parque Empresarial del Pacífico inició el año anterior, cuando varios inversionistas pagaron un avalúo sobre el proyecto que, según han indicado las propias autoridades del Banco de Costa Rica y de la SAFI, sus rendimientos se vieron afectados por la pandemia.

En ese avalúo, se fijó un valor de $27 millones, el cual contrastaba con otros seis estudios que tasaban el PEP hasta en  $87 millones. En el 2020, el BCR SAFI pagó poco más de $70 millones.

Durante cuatro años consecutivos (2020, 2021, 2022 y 2023) los avalúos realizados siempre dieron un valor cercano al monto pagado por el Parque Empresarial del Pacífico.

En el avalúo del 2024 el valor se desploma a $28 millones aparentemente porque hubo un cambio de metrología de cálculo establecido por la Sugeval, así como el abandono de áreas, alquileres a muy bajo precio y altos niveles de desocupación.

Según información recibida, el PEP después de la venta ha sido desmantelado y abandonado por el administrador del proyecto, con una ocupación casi nula. El deterioro por falta de mantenimiento y la alta desocupación podría ser un factor fundamental en el resultado del avalúo del 2024. Este medio solicitará una copia del avalúo para hacer una evaluación de las razones del cambio.

En su momento, Tomás Soley, Superintendente de Valores, dijo a la prensa que «los fondos de inversión tienen tiempos buenos y tiempos malos, y eso los inversionistas deben tener claro que el prospecto del fondo de inversión revela los riesgos que puede tener un fondo de inversión».