Redacción – El Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) anunció la habilitación de cuatro pozos entre las 14 fuentes afectadas en Esparza. Esta acción tiene como objetivo garantizar que los residentes de la zona cuenten con agua en sus hogares, aunque, siguiendo las directrices del Ministerio de Salud, el agua suministrada solo está autorizada para labores de limpieza, como el lavado de ropa y la limpieza de sanitarios. No se permite su uso para la preparación de alimentos o consumo humano.
Juan Manuel Quesada, presidente del AyA, subrayó la importancia de priorizar la salud pública «Con la salud de las personas no se juega. Le pedimos comprensión a todas esas personas afectadas; hasta que tengamos certeza al 100% de que el agua es potable, lo vamos a anunciar».
La decisión de activar estos pozos sigue a un análisis preliminar que indica que, por su ubicación, no hay una afectación directa en la calidad del agua de estas fuentes específicas. Se espera que los resultados de las muestras de agua tomadas por el Laboratorio Nacional de Aguas durante el fin de semana estén disponibles este martes. Estos resultados serán cruciales para que los técnicos evalúen la situación y determinen las acciones necesarias a seguir.
Mientras tanto, el AyA continúa con el reparto de agua potable a través de 12 camiones cisterna en Esparza y en la Gran Chacarita, Barranca y Roble. Además, se instalarán dos tanques de 10 mil litros de agua cada uno, proporcionados por la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), en el parque Marañonal y en otro parque del centro de Esparza para atender la emergencia. Este servicio se mantendrá hasta que se restablezca la normalidad en los acueductos.
Por otro lado, el Ministerio de Salud emitió órdenes sanitarias contra las empresas responsables del incidente de contaminación, exigiendo la limpieza y remoción exhaustiva del fungicida en todos los márgenes de la quebrada afectada, además de un plan de monitoreo durante los próximos 12 meses.
En respuesta a la crisis, el AyA está elaborando un informe detallado para evaluar la magnitud y las repercusiones del problema. Este informe servirá como base para tomar las medidas legales pertinentes contra las empresas responsables de la contaminación.