POR INFOBAE
Redacción – La boxeadora italiana Ángela Carini, abandonó la pelea de la categoría de los 66 kilos de los Juegos Olímpicos a los 46 segundos, luego de que se enfrentara a la argelina Imane Khelif.
“Subí al ring e intenté luchar. Quería ganar. Recibí dos golpes en la nariz y ya no respiraba, me dolía mucho, fui a ver al maestro Renzini y con madurez y valentía le dije basta”, expresó Carini
La razón del abandono se dio debido a que su rival tiempo atrás fue sometida a estudios que expusieron un “nivel de testosterona más alto que el nivel medio de las mujeres”.
Eso quiere decir, según el Instituto Superior de Salud, que la rival es “intersexual”, es decir, tiene “variaciones innatas (presentes desde el nacimiento) en las características del sexo, que no entran dentro de las nociones típicas del cuerpo femenino”.
El detrás de escena es que Khelif, al igual que la taiwanesa Lin Yu-ting, habían sido excluidas por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) de las finales del campeonato mundial del año pasado en Nueva Delhi por no “superar las pruebas de elegibilidad de género”. Sin embargo, el Comité Olímpico Internacional decidió optar por otro camino distinto al del organismo pugilístico y les permitió estar presentes en París 2024.
El presidente de la IBA, Umar Kremlev, había advertido que “a partir de las pruebas de ADN, hemos identificado a varios deportistas que intentaron engañar a sus compañeros haciéndose pasar por mujeres”. Y aclaró, según reprodujo el diario Marca de la agencia de noticias rusa Tass: “Según los resultados de las pruebas, se demostró que tienen cromosomas XY. Estos deportistas fueron excluidos de la competición”.
Además la italiana añadió: “No soy nadie para juzgar o tomar una decisión, si esta chica está aquí debe haber una razón. Luché y subí al ring a pesar de las miles de polémicas que había, no soy nadie para juzgar. Sentí golpes muy fuertes, recibí golpes, soy una luchadora y mi selección lo sabe, soy alguien que aún ante el dolor nunca se detiene. Si paré lo hice sólo por mi familia. ¿Fue un combate irregular? No soy nadie para juzgarlo”.
