Redacción – En los últimos años los expertos en salud afirman que el sedentarismo se ha convertido en una pandemia a nivel global, y Costa Rica no escapa de este problema.
De acuerdo con reportes, el sedentarismo en nuestro país muestra una tendencia al alza en los últimos 24 años, pasando del 41% a inicios de los 2000 a un 49.7% en 2022. Además, se proyecta sería que aumente a 52% para el 2030.
Asimismo, 4 de cada 10 hombres adultos entran en la categoría de Sedentarios. Por su parte, entre las mujeres, el sedentarismo está presente en casi 6 de cada 10. Además, Costa Rica destaca entre los 22 países que superan un 40% de prevalencia en esta estadística.
De acuerdo con Karla Solís, fundadora y especialista en movimiento humano de EKA Gimnasio Boutique, estos datos muestran una realidad muy preocupante que afecta directamente a la salud de la población del país. Ante ello, la especialista señaló como una forma de contrarrestar esta situación es la promoción del deporte y la actividad física.
Añadió que, para esto es importante también tomar en cuenta, que la realización de ejercicio físico y su relación con aspectos sociodemográficos, como la edad, sexo y el nivel académico y las motivaciones, puede variar en una misma población, por lo que se hace necesario conocer estas diferencias en la población para poder ofrecer opciones reales de acuerdo con el entorno.
La Organización Mundial de Salud (OMS) y con las Guías de Actividad Física de los Estados Unidos, la actividad física mínima recomendable para adolescentes y niños (5-17 años) debe ser un promedio de 60 minutos diarios, de tipo aeróbica y de intensidad moderada a vigorosa. Y para mayores de 18 años se dice que debe ser de, al menos, 150 minutos en actividad moderada o 75 minutos de actividad intensa.
Solís comentó que el aumento del sedentarismo entre la población puede generar múltiples afecciones en la salud y vida de las personas. Por ejemplo, la ansiedad, depresión, fatiga muscular, contracturas musculares, problemas articulares y músculo-esqueléticos. Estas, mencionó la especialista están directamente relacionados con un mayor riesgo de enfermedades crónicas degenerativas como diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, cáncer y obesidad, entre otras.
Además, añadió, otra característica negativa del sedentarismo en las personas es la disminución en los niveles de energía y concentración. Lo cual, también está relacionado con problemas de salud mental como la ansiedad y depresión.
“Estas condiciones pueden afectar negativamente la productividad y el compromiso en el trabajo. Esto va asociado a los niveles de estrés, ansiedad, posturas inadecuadas por muchas horas, fatiga muscular y problemas musculo esqueléticas disminuyen la capacidad productiva de los colaboradores”, confirmó Solís.
La especialista hace hincapié en desarrollar campañas de sensibilización y concienciación sobre los beneficios de la actividad física y una alimentación saludable, así como del impacto negativo del sedentarismo, en la vida de las personas.
¿Cómo luchar contra el sedentarismo?
Solís, además, brindó varias recomendaciones que se pueden aplicar a nivel de empresas y organizaciones para luchar contra el sedentarismo entre la población nacional. Estas son:
- Fomentar actividades físicas en familia, como caminatas, juegos al aire libre y deportes en grupo, para integrar la actividad física en la vida cotidiana.
- Promover el uso de aplicaciones y dispositivos tecnológicos que ayuden a las personas a monitorear y mejorar su actividad física y hábitos alimenticios.
A nivel de empresas, se pueden tomar medidas como implementar pausas activas, crear programas de retos, desafíos y competencias entre los colaboradores con reconocimientos o premios a los empleados que participen regularmente en actividades físicas o que logren metas de salud. Un ejemplo del impacto positivo cuando las empresas han implementado programas de bienestar y fomentan la actividad física entre sus colaboradores, se alcanzan mejoras en el rendimiento y una reducción en el ausentismo del personal.