Redacción – Un trágico accidente aéreo ocurrido este lunes enluta nuevamente a la familia Miranda, al traer a la memoria otro fatídico suceso que ocurrió hace 24 años. En esa ocasión, Cleto Miranda Luna, padre de Mario Miranda Ramírez, el piloto siniestrado esta semana, perdió la vida en circunstancias similares.
El 15 de enero del año 2000, Cleto Miranda Luna piloteaba un avión comercial LET 410, de fabricación checa y matrícula salvadoreña, desde el aeropuerto Tobías Bolaños hacia Tortuguero. Transportaba a 15 turistas extranjeros cuando, apenas tres minutos después del despegue, la aeronave se precipitó sobre una casa en Pavas, en lo que se presume fue causado por exceso de peso.
El accidente causó una intensa movilización de cuerpos de emergencia, quienes atendieron a las víctimas y trabajaron para evitar una posible explosión en la zona residencial afectada. En la casa impactada, las tres hijas de la familia residente salieron ilesas, y la empleada doméstica sufrió heridas leves. Sin embargo, el siniestro dejó cuatro turistas fallecidos en el lugar y al piloto gravemente herido, quien murió 15 días después en el hospital.
Este lunes, Mario Miranda Ramírez, hijo de Cleto, perdió la vida en otro accidente aéreo. Aunque los detalles del siniestro aún están en investigación, este hecho marca un triste capítulo para la familia, unida por una dolorosa coincidencia en la aviación, la misma profesión que ambos hombres abrazaron con dedicación y pasión.
Las autoridades continúan trabajando para esclarecer las causas de este último accidente y garantizar la seguridad en el sector aeronáutico. Mientras tanto, familiares, amigos y colegas lamentan la pérdida de dos generaciones de pilotos que compartieron un legado en el aire y un destino trágico.
