Cartago podría despedirse de congestión vial con posibles pasos a desnivel

• También se preparan diseños para mejorar ruta Birmania – Santa Cecilia y ampliar el tramo Palmar Norte – Paso Canoas

Redacción – Si usted transita de manera frecuente por La Lima o Taras en Cartago y conoce el tráfico constante, preste atención a los siguientes datos:

Los diseños de los pasos a desnivel que se construirán en los cruces de Taras y La Lima sobre la carretera Florencio del Castillo, serían aprobados a más tardar en la primera quincena del mes de mayo.

El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), plantea el proyecto para una pronta solución del congestionamiento vial que se da en los pasos de La Lima y Taras para entrar a la provincia de Cartago, que se conocen por lo transitados que son durante todo el día.

Por su parte, el MOPT prepara los diseños para revonar la ruta que va de Birmania hasta Santa Cecilia en Guanacaste, así como la ampliación a cuatro carriles del tramo Palmar Norte hasta Paso Canoas en Puntarenas.

Estos planos están a cargo del consorcio IDOM Consulting, Engineering, Architecture, S.A.U. & DEHC Ingenieros Consultores S.A, quienes también son los encargados de las modificaciones del diseño en Birmania y Santa Cecilia y la extensión de la carretera desde Palmar Norte hasta la frontera con Panamá.

Para Cartago, se harán cambios en 2.8 kilómetros como aproximado. En el sector de Guanacaste se mejorarán 20.7 kilómetros y en Puntarenas se tiene previsto el trabajo en 93 kilómetros.

Por la longitud de este último, la entrega de diseños se divide en distintas secciones, por lo que se espera tener aprobados todos los diseños de para el sector Palmar Norte – Chacarita en julio. El tramo siguiente desde Río Claro hasta Paso Canoas estaría listo en octubre de 2018. Diferente de los anteriores, para la parte Chacarita – Río Claro los diseños estarían aprobados en junio del siguiente año

Los cuatro proyectos fueron adjudicados por un valor de $4 millones 750 mil, cifra cercana a los ₡2.700 millones. El financiamiento corre por cuenta del Banco Interamericano de Desarrollo con el Programa de Infraestructura del Transporte.