Redacción- El reconocido estratega español Luis Enrique, llega al banquillo español con la intención de quitar el «Hierro» dejado en La Roja después de la prematura eliminación en Rusia 2018.
El entrenador dirigirá a la selección española hasta la Eurocopa de 2020.
El técnico asturiano, de 48 años, fue nombrado seleccionador nacional de España, ocho días después de la eliminación de España del Mundial de Rusia en octavos de final, ante la anfitriona, después de una de las participaciones más pobres que se recuerdan de La Roja en una Copa del Mundo.
Luis Rubiales, el presidente federativo, y José Francisco Molina, el director deportivo nombrado horas antes, argumentaron la elección en tres razones.
Primero, que se trata de un entrenador moderno que sabrá desarrollar el estilo de juego que ha llevado a España a los éxitos de 2008-2012.
Segundo, que es un hombre que no ficha pensando en ganar dinero, en la federación o fuera de ella, sino porque tiene una ambición sentimental de entrenar a España.
Tercero porque considera que Luis Enrique posee el carácter suficiente para pacificar un vestuario roto, entre otras cosas, por los conflictos que generó el fichaje de Lopetegui por el Real Madrid y su posterior destitución a tres días del comienzo de la Copa del Mundo.
“Hay dos ambientes, el interno y el externo», dijo Rubiales.
Esto lo afirmó, cuando le preguntaron por la presunta carga que pesaba sobre Luis Enrique debido al desagrado que genera entre ciertos sectores madridistas su pasado como jugador y técnico del Barcelona.
«Sabemos», prosiguió el dirigente, «que Luis Enrique es una persona con carácter que ha tenido algunos problemas con la prensa. Pero el ambiente interno esperamos que sea mejor [de lo que ha sido con Lopetegui y Hierro]. Intentaremos llevarnos bien entre todo el mundo, entendiendo que él viene a ser seleccionador y a intentar que la selección gane, que ese es su cometido”. Afirmó.
Luis Enerique sustituye a Lopetegui, seleccionador desde julio de 2016, y a Hierro, que ocupó el cargo de forma interina durante el Mundial. A diferencia de sus predecesores posee una trayectoria importante en los banquillos, convalidada con títulos.
El entrenador estaba sin equipo desde que concluyó su contrato con el Barcelona, en donde logró una Champions, dos Ligas y tres Copas entre 2015 y 2017. Con anterioridad había dirigido al Barcelona B, a la Roma y al Celta.
Como jugador se formó en la cantera de Mareo. Atacante bravo, de largo recorrido, se desempeñó como extremo, interior y segunda punta gracias a unas condiciones atléticas notables.
Además, en su época jugó dos temporadas en el Sporting, cinco en el Real Madrid y ocho en el Barcelona, en donde vivió sus mejores años deportivos y se convirtió en un referente de la hinchada. Con la selección española, participó en tres Copas del Mundo, de 1994 a 2002.
“Cuando Hierro me comunicó su marcha la semana pasada», recordó Rubiales.
«Fue relativamente sencillo llegar a un acuerdo con Luis Enrique porque él quería ser seleccionador español. Tenía ofertas tremendamente importantes. Económicamente era imposible que llegáramos a sus números y él ha puesto mucho de su parte porque si no, habría sido imposible. Él quería comandar estos dos próximos años. Esperemos que lo haga con el mayor de los éxitos”.
Luis Enrique asumirá las riendas de La Roja de manera inmediata.