Redacción. El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de San Carlos indaga el robo de ¢28 millones en efectivo que fueron sustraídos de un cajero automático del BAC ubicado en una finca piñera de Cutris.
Al parecer, un grupo con amplios conocimientos en cajeros llegó por la parte trasera del equipo y logró abrirlo. Para ello, habrían utilizado un sofisticado equipo que permitió romper el hierro que recubre la parte donde se almacena el dinero.
El robo fue descubierto luego de que un cliente llegara a utilizar el cajero y percibió un fuerte olor a quemado. De inmediato llamó a las autoridades, las cuales confirmaron que el cajero había sido violentado con sumo profesionalismo.
De momento, no hay rastros de los autores de este robo, quienes sí manejan información precisa sobre los movimientos del banco, pues saquearon el equipo horas después de que fuera recargado de billetes.