• La especialista ha hecho un especial énfasis en el rol importante del padre, madre o personas encargadas

Redacción– El Colegio de Profesionales en Orientación (CPO) hace un llamado a los padres de familia para que puedan idenficar a tiempo los factores de riesgo que podrían exponer a sus hijos e hijas al consumo de drogas, esto en el marco del Día Internacional contra el Tráfico Ilícito y Abuso de Drogas.

“El apoyo familiar es fundamental para que las personas menores de edad logren un desarrollo personal y social exitoso. Es fundamental que los padres, madres, así como personas significativas se atrevan a discernir, a decir no y cuando decir si, sin miedo de perder el amor y el cariño de sus hijos e hijas. Es importante destacar que el rol de los
padres y madres no es precisamente ser amigos o amigas”, explicó Zeanne González, Profesional en Orientación especialista en la Prevención de Adicciones.

La especialista ha hecho un especial énfasis en el rol importante del padre, madre o personas encargadas juegan en la educación de sus hijos e hijas, en el inicio del consumos de sustancias como el alcohol, tabaco u otro tipo de drogas.

“Los niños y las niñas no nacen con límites, es en los primeros años que necesitan adquirirlos para sentirse personas seguras y amadas. Necesitan sentir que su padre y madre ejercen la autoridad y que su casa no es un hotel donde pueden ir y venir sin ningún establecimiento de horario de salidas y llegadas.


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Si los límites son claros, las personas adolescentes logran alcanzar su propia identidad, aprenden a asumir la responsabilidad de sus actos y muestran capacidad para la toma decisiones”, expresó Zeanne González, Vocera del Colegio de Profesionales en Orientación.

El adecuado manejo de límites, la comunicación, las expresiones de afecto, los valores, así como la satisfacción de las necesidades fisicas, psicológicas y emocionales, son factores que pueden disminuir el riesgo del consumo de sustancias psicoactivas en los hijos e hijas adolescentes.

En el año 2015 el instituto Sobre Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA) realizó estudios epidemiológicos en la población en general, mediante la Encuesta a Hogares desarrollada cada cinco años. Estos estudios han concluido que la droga de mayor consumo en personas adolescentes es el alcohol. Asimismo concluyen que en promedio las personas adolescentes inician el consumo de:

– Tabaco a los 13.3 años
– Alcohol a las 13.6 años
– Marihuana a los 14.2 años


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La profesional destaca que durante la etapa de adolescencia, el ser humano se desarrolla integralmente desde las áreas biológica, sexual, social, espiritual y vocacional.

En este sentado, la especialista en adicciones enfatiza que el consumo de sustancias psicoactivas en esta etapa de la vida afecta el desarrollo integral, porque desde el nacimiento hasta los 25 años, el cerebro humano se encuentra aún en relativo desarrollo.

¿Cómo identificar síntomas de consumo?

Existen ciertos síntomas que se pueden visualizar, entre ellos:
– Sensación de mareo
– Risa sin justificación
– Dificultad para caminar
– Descontrol
– Dificultad en la memoria a corto plazo.
– Cuando desaparecen los efectos anteriores la persona podrá sentir mucho sueño.

Otros indicadores son:
• Aislamiento
• Descuido de la apariencia personal
• Apariencia triste y sin motivación
• Fatiga
• Hostilidad
• Deterioro en las relaciones familiares y amistosas
• Cambios bruscos del humor
• Alteraciones en el uso del dinero
• Pérdida de objetos en el hogar
• Cambio de hábitos
• Cambio de amigos o amigas
• Mentiras frecuentes
• Bajo rendimiento académico
“Es importante destacar que los indicadores anteriores no son prueba absoluta para afirmar un posible consumo, pero podrían ser tomados en cuenta como posibles señales, o gritos de auxilio por parte de su hijo o hija en el área física, emocional o espiritual”, explicó González.

Otras señales de alerta que deben tomar en cuenta los padres y madres de familia, son los objetos que se asocian al consumo de la marihuana. Estos accesorios son los siguientes:

• Pipas
• Papeles para enrollar cigarrillos
• Uso de incienso o desodorantes de aire
• Olores inusuales en la ropa
• Gotas para los ojos
• Ropa, posters y accesorios con símbolos de consumo

Si usted encuentra algunos de estos en la habitación de su hijo e hija adolescente, es importante que proceda a indagar y solicitar ayuda profesional en los centros educativos en los servicios de Orientación o en el Centro Nacional de Atención Integral en Drogas para Personas Menores de Edad del IAFA.