Foto: Fines Ilustrativos.

Redacción- Solo un 20% de adultos mayores (en sus 80 años), en promedio, tienen sexo de calidad; es decir, no tienen inconvenientes o impedimentos en su salud que los restrinja de disfrutar plenamente de sus relaciones sexuales.

La mayoría de adultos mayores presentan algún tipo de complicación por disfunción eréctil que les impide tener relaciones plenas; sin embargo, esto no quiere decir que no sean sexualmente activos.

Este, entre otros mitos relacionados con la sexualidad de los adultos mayores, son muy comunes en la opinión pública.

Pese a que se habla de que esta población puede disfrutar del sexo plenamente a como lo podrían hacer personas jóvenes, la realidad es que no.

«Ese mensaje a calado mucho, hay sexólogos que dicen, ‘no usted no tiene por qué fallar’, y no, claro que tiene todo el derecho a fallar por el simple hecho del envejecimiento, pues el aporte de sangre al pene va a disminuir», dijo el doctor Andrés Arley, presidente de la Asociación Costarricense de Urología, quien también trabaja para el Hospital México.


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Las erecciones de los adultos mayores suelen ser incompletas; esto quiere decir que el pene no es lo suficientemente rígido para una penetración óptima.

Según dijo Arley, los adultos que «pueden jactarse de tener sexo de calidad», son aquellos que durante su vida se mantuvieron activos realizando ejercicios, se alimentaron de manera óptima o no abusaron del consumo del alcohol.

Si estas personas entradas en edad presentan enfermedades como diabetes, hipertensión, obesidad u otra complicación, lo más probable es que su grado de disfuncion eréctil sea mayor.

Otro de los mitos tiene que ver con el consumo de pastillas, dadas por receta médica, que funcionan como potenciadores sexuales. Arley asegura que muchos adultos desisten de tomarlas por miedo a sufrir efectos secundarios, incluso si son dadas por los mismos médicos.

La realidad es que estas pastillas no provocan complicaciones en la salud, a menos de que la persona adulta ya sufra algún padecimiento debidamente diagnosticado por los especialistas.