Redacción- El coronavirus, COVID-19, es una enfermedad en la cual estamos aprendiendo en la medida que la conocemos.
Los profesionales de la salud han avanzado rápidamente para poder brindar las mejores formas de cuidar de sus pacientes. Lo que se ha observado es que, entre los infectados con el virus que presentan enfermedades subyacentes podrían tener una evolución más complicada, como las personas con diabetes.
Esto no quiere decir que todas las personas con diabetes tengan una mayor susceptibilidad de contraer o padecer la enfermedad en sus manifestaciones más peligrosas de manera uniforme.
Una persona con diabetes controlada y con complicaciones no avanzadas, disminuye estos riesgos de manera considerable. Por este motivo, hoy es muy importante que las personas con diabetes trabajen para mantener la enfermedad bajo control, evitar las subidas y bajas anormales de la glucosa en sangre, un estilo de vida saludable y una medicación que cumpla con los objetivos terapéuticos.
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La dieta adecuada es uno de los factores más importantes para poder mantener la enfermedad bajo control y hoy hay muchas alternativas que le pueden ayudar a lograrlo.
La Dra. Yumaira Chacón, Gerente Médico para Abbott en Costa Rica, explica que “apoyar a las personas a lograr un buen control glicémico puede ayudar a mejorar los resultados” y añade que “la terapia nutricional puede desempeñar un papel clave para ayudar a las personas con diabetes a controlar su condición, mejorar el control glicémico y mejorar los resultados de salud”.
Es un hecho que todos tenemos la susceptibilidad en contraer la infección por COVID-19. Igualmente, todos debemos trabajar antes de padecer la infección para que sus efectos sean los menores posibles.
Hacer ejercicio, comer bien, cuidarse para evitar el contagio, tener hábitos de vida saludables, y tratar de controlar las afecciones padecidas. Específicamente en la persona con diabetes, el control de la glicemia debe ser una prioridad.
Entre las personas hospitalizadas, la hiperglicemia está asociada a efectos adversos y a una mala evolución. Por este motivo, los profesionales de la salud tienen como objetivo terapéutico el control de la glicemia en el paciente hospitalizado y en la Unidad de Cuidados Intensivos.
La nutrición es un componente vital para ayudar a las personas a controlar su diabetes, lograr el control glicémico y mejorar los resultados de salud ante una infección, enfermedad o trauma.
Es común que una persona con diabetes que padezca una infección como el COVID-19, pierda el control de la diabetes y requiera de una atención en la que se incluye, si está indicado, productos de nutrición especializado para personas diabéticas y de esta manera lograr una nutrición adecuada y al mismo tiempo, ayudar a controlar la hiperglicemia. Las fórmulas específicas para la diabetes proporcionan nutrientes clave y beneficios para la salud, como:
Carbohidratos de digestión lenta con un bajo índice glicémico que pueden ayudar a minimizar el efecto sobre los niveles de azúcar en la sangre
Ácidos grasos monoinsaturados que pueden reemplazar las grasas saturadas y apoyar los niveles de lípidos como el colesterol.
Prebióticos y fibra dietética que promueven la salud intestinal y mejoran los niveles de colesterol.
Proteínas de alta calidad y otros nutrientes para el sistema inmunológico, incluidos los antioxidantes (vitaminas C, E, selenio), vitamina D, vitamina A y zinc.
Los estudios han demostrado que las fórmulas específicas para la diabetes pueden mejorar los resultados de salud en personas con diabetes en el ámbito clínico. En la vida cotidiana, estos productos nutricionales especializados para la diabetes también pueden ayudar a lograr los objetivos de las medidas tomadas en busca del control de la enfermedad. He aquí algunas recomendaciones que podrían ayudarlo a controlar su glicemia:
Evitar las bajas anormales de azúcar en sangre. Lo primero es que se debe evitar a toda costa el ayuno prolongado y siempre debe tener a la mano alimentos o productos nutricionales para consumirlos a la hora establecida en sus rutinas.
Si ha sufrido de “hipoglicemia” previamente es aconsejable tener siempre con usted una dosis de glucosa (15 g). Consulte con su médico si tiene riesgos establecidos para hipoglicemia.
Manejar la hiperglicemia y hacer prevención. Evitar el consumo de alimentos que suben la glicemia, usar alimentos con bajo índice glicémico y aprender a comer de acuerdo con su
condición. A veces es difícil de lograrlo en el mundo de hoy y por esto, debe tener opciones de alimentación disponibles para usted.
Manejar la dieta de acuerdo con el grado de actividad física. El ejercicio aumenta los
requerimientos nutricionales y debe tener las opciones más saludables para suplir sus necesidades.
Tener disponible alimentos o productos saludables si puede prever que no va a poder tomar sus alimentos en el tiempo que acostumbra.
Cuidarse de los efectos del alcohol que tiende a producir bajas de azúcar en sangre horas
después de su consumo.
Saber que la introducción o modificación de los medicamentos para la diabetes requiere
modificaciones en la dieta. Hable con su médico y nutricionista para conocer mejor que medidas debe tener para estar mejor preparado.
Modificar la alimentación cuando esté enfermo. Usualmente las infecciones y las enfermedades hacen que el control de la diabetes se pierda.
Las pérdidas del apetito, los efectos de los alimentos usuales tienen consecuencias diferentes durante las enfermedades. No permita que su estado nutricional se deteriore.
Después o durante la recuperación de una enfermedad que ha afectado su estado nutricional es necesario que con frecuencia necesite de un producto nutricional especializado además de una dieta saludable.