Foto: FUTV.
  • Iniciativa se basa en el manejo que le han dado otras ligas alrededor del mundo

Redacción- El Ministerio de Salud rechazó el ajuste al protocolo para el manejo de los casos negativos por el virus en el fútbol nacional.

Así lo anunciaron las autoridades del balompié costarricense la tarde de este viernes luego de recibir la negativa por parte de ministerio.

Lo que genera que en caso de detectarse algún caso positivo dentro de algún club nacional el plantel completo tenga que ser enviado a cuarentena.

Medida que quería ser modificada para evitar retrasos en las competiciones, como ya sucedió con dos clubes de la máxima categoría.

Lo que causó que Saprissa y Cartaginés se mantuvieran aislados de la competencia y tuvieran que reajustar su calendario de partidos.

«La semana pasada fuimos convocados por las autoridades del Ministerio de Salud y el Ministerio del Deporte y se nos informó que se nos entregaría un documento para que se le hiciera algunos cambios en el fundamento del Protocolo, con lo cual entendíamos había una aceptación del planteamiento y que era solo cuestión de subsanar aspectos formales. Tal documento nunca llegó», detalla el comunicado enviado por Unafut.

La Comisión Técnica conformada por la Unafut para presentar ese ajuste al protocolo es encabezada por el doctor Esteban Campos.

Quien fue llamado por parte del Ministerio de Salud ayer viernes para comunicarle que la solicitud había sido rechazada.

«Sin embargo, nuestro coordinador de la Comisión Médica, doctor Esteban Campos, fue convocado ayer a una reunión con autoridades del Ministerio de Salud y Ministerio del Deporte y se le dijo en forma verbal, que el adendum al protocolo quedaba rechazado para todas las competiciones nacionales y que teníamos que someternos a los lineamientos generales», agrega el comunicado.


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Este ajuste pretendía velar por el cumplimiento de todas las competiciones de fútbol que se encuentran dentro de la iniciativa.

Además de evitar que los certámenes tengan que ser cancelados en su totalidad por la complicación para reprogramar los encuentros.