- Sospechoso confesó haber cometido el crimen
- Una mujer ya había sido condenada por el crimen
Redacción- Cuando sintió el terror de ser condenado a casi 50 años de cárcel, un femicida rompió en llanto y pidió perdón por los crímenes cometidos.
Se trata de un hombre de apellidos Ugalde Guadamuz, quien este viernes enfrentaba un juicio por haber cometido un homicidio y un aborto.
La petición de perdón se dio luego de que el hombre confesara que asesinó y calcinó a su exnovia embarazada, una menor de 17 años.
“Es algo que yo no puedo reparar ni aunque me metan mil años a la cárcel. Pido misericordia, yo no quiero pasar mi vida en prisión. Estoy totalmente arrepentido.
Pónganse la mano en el corazón (…) Yo no quería matarla, solo darle una lección, pero no matarla.
(…) Nada justifica los hechos, es el gran error de mi vida. Lo reconozco, pido perdón, que no me guarden resentimiento. Solo Dios sabe que estoy arrepentido”, dijo el hombre.
Según testificó Ugalde, cuando cometió los delitos había sufrido un episodio de ira por unas fotografías que vio de su expareja con otro hombre.
El juicio contra Ugalde continuará; sin embargo, la Fiscalía solicitó en su contra que se dicte una pena de 45 años de cárcel: 35 por el homicidio y 10 por el aborto.
De acuerdo con la Fiscalía, la menor habría muerto desangrada cuando le intentaron extraer el bebé.
Junto con Ugalde participó una mujer para cometer los hechos, ella sería la pareja de él en ese momento.
Esta mujer, entre junio y setiembre del año anterior, se enfrentó a la justicia y fue sentenciada a 36 años de cárcel por el crimen.