- Joven estaba a la espera del ultrasonido para conocer el género del bebé
- Sospechoso habría pedido días atrás a la joven que abortara, pero ella se negó
Redacción- Francis León, la joven víctima de un femicidio en Liberia, se encontraba organizando su té de canastilla con unas amigas horas antes de ser asesinada.
La joven tenía siete meses de embarazo y estaba ansiosa por conocer el género de su bebé para organizarle la bienvenida.
Por ese motivo, el mismo día de su asesinato, León había llegado hasta donde su amiga para asistir luego a un ultrasonido y afinar los últimos detalles de la celebración.
Así lo relató Tatiana García, madre de la amiga con quien León organizaba el té de canastilla al medio Anexión TV para Teletica.
“Francis vino hoy (jueves) donde una amiga porque, junto con mi hija, iban a planear el té de canastilla, pero ellas querían saber el sexo del bebé para poder realizarlo. Como ella ya estaba separada del hombre y no quería nada con él, vino y la mató; el bebé y ella murieron”, agregó García.
Esa versión brindada por García concuerda con la versión preliminar que maneja el Organismo de Investigación Judicial.
«La mujer era vecina de Filadelfia, había llegado donde una amiga porque hoy se tenía que hacer un ultrasonido por el embarazo», detalló la policía judicial.
García también reveló que León les había contado que hace un tiempo su expareja le había pedido que abortara; sin embargo, ella se negó.
“Ella, hace como un mes, estuvo en mi casa porque es amiga de una de mis hijas. Nos contó que su pareja había llegado a la casa de ella, en Filadelfia, a decirle que abortara el bebé, pero ella le contestó que no quería abortarlo”, dijo García a Anexión TV para Teletica.
Ahora, el caso se encuentra siendo investigado por el OIJ y la Fiscalía, quien ya solicitó medidas cautelares contra la expareja de León, un joven de 21 años de apellidos Ramírez Duarte.
