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Redacción-Las autoridades del Área de Salud de Tibás, administrada por COOPESAIN R.L., levantan la voz para que se denuncien las relaciones desiguales y de poder entre una persona adulta y una adolescente. Esto debido a que no solo son inconvenientes sino dañinas física y emocionalmente para los menores.

Andrea Mora, trabajadora social, del Área de Salud de Tibás, indica que en los últimos tres años se atendieron en promedio 40 adolescentes embarazadas al año, y de ellas más del 40 por ciento mantuvo una relación impropia.

“Este tipo de casos son referidos al departamento de Trabajo Social, y procedemos a denunciar la situación ante el Ministerio Público o a las autoridades del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) siguiendo el debido proceso”, recalca Mora.

Mora agrega que, en muchos casos, la convivencia conyugal, es avalada incluso por los progenitores.

En la actualidad, 13 jóvenes embarazadas son atendidas en el departamento de Trabajo Social del Área de Salud de Tibás, y en la mayoría de los casos los padres son adultos.

“Es importante que la gente denuncie este tipo de relaciones e incluso de forma anónima, pues afectan a mediano plazo el desarrollo físico y emocional de las jóvenes”, señala la trabajadora social de COOPESAIN R.L.

En una relación impropia, el período de crecimiento y desarrollo se violenta porque se fuerza al menor de edad a vivir procesos para los que no está preparada y que pueden amenazar su integridad e incluso su vida.

Adicionalmente, las víctimas suelen abandonar o retrasar sus estudios y son sometidas emocional y económicamente a los deseos del adulto.

También, sufren daño en la autoestima y suelen surgir sentimientos de inseguridad, tristeza, impotencia y miedo. Sin dejar de mencionar que suelen aislarse, renunciar a las relaciones con amigos y corren el riesgo de contraer una infección de transmisión sexual.

Contra la ley

La ley castiga al adulto que tenga relaciones sexuales con menores de edad.

La Ley 9406 protege a los menores en situación de violencia y castiga al adulto, según el tipo de relación existente. Por ejemplo, será penado con prisión de tres a seis años cuando la víctima es mayor de 15 años y menor de 18 años y el autor sea siete o más de años mayor que está en edad.

También, con una pena de prisión de cuatro a diez años, siempre que el autor tenga parentesco familiar o se encuentre en una posición de confianza o autoridad con la víctima.

Las personas pueden llamar de forma confidencial a la línea 9-1-1, acudir al Área de Salud de Tibás, específicamente en el departamento de Trabajo Social o bien ante las autoridades judiciales.