- Bukele sacó a relucir su gran labor en seguridad en tres años de gobierno
Redacción – El mediático presidente salvadoreño, Nayib Bukele, le está devolviendo la paz en las calles a sus localidades, gracias a la guerra contra las pandillas que ya ha hecho que más de 36 mil mareros estén tras las rejas en cárceles de máxima seguridad.
Este pasado 1 de junio, Bukele rindió cuentas al pueblo, diputados de su país y demás personalidades del gobierno, esto con motivo al tercer año en el poder del mandatario, que poco a poco ha ido haciendo cambios significativos en su patria.
En su discurso solemne, el jerarca cuscatleco recordó que cuando inició funciones en junio del 2019 se topó con un país hecho un desastre producto de los últimos gobiernos, que tenían a la nación centroamericana sumergida en una grave crisis social.
Uno de los problemas principales era la inseguridad, por lo que empleó en diferentes puntos de El Salvador el famoso «Plan Control Territorial», con el que logró maniatar a las maras, gracias al aumento del personal en la Policía Nacional y Ejército.
Por ello, no es casualidad que sus tres años de gobierno ya se registren 128 días sin homicidios, lo cuál es un logro importante, debido que hace 10 años atrás solo se registró un día sin homicidios, por eso no es casualidad que un 87% del pueblo apruebe a Bukele.
Este es un momento único…#Seguimos pic.twitter.com/vfgkpyOx0D
— Nayib Bukele (@nayibbukele) June 2, 2022
La guerra contra las pandillas ha hecho que ya se más de 36 mil malandros capturados en 65 días de Régimen de Excepción declarado por Bukele y su gabinete, para así frenar la ola de homicidios que aquejó al país a finales de marzo.
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Nayib Bukele sacó a relucir las grandes cifras que ha cosechado su gestión como presidente, donde los salvadoreños han ido recuperando la tranquilidad, mientras que los mareros temen, se enconden, se queman tatuajes y hasta se maquillan para no ir presos.
«En tres años de gobierno llevamos 128 días sin homicidios, cada vez que estos grupos terroristas atacaron respondimos rápido y con firmeza, pensaron que no íbamos hacer nada como lo pasados gobiernos. Sin embargo, a finales de marzo las pandillas coordinaron un ataque a escala nacional que dejó 87 salvadoreños muertos, era cifra era inaceptable para este gobierno, fue un fin de semana duro y respondimos con fuerza.
Desplegamos el 100% de policías y militares en todo el territorio nacional. Mientras pedíamos un régimen de excepción y un pliego de reformas a las leyes penales. Ahora podemos retener más tiempo a los criminales, mientras recabamos pruebas para que no salgan libres, las penas por ser pandillero son verdaderos castigos y de hasta 45 años de prisión, hemos incrementado las penas para todos los delitos.
Los pandilleros que todavía siguen sueltos y que son un número grande aún, tratan de esconderse de todas las formas posibles. Antes se tatuaban para sentirse orgullosos de quiénes eran y lo que hacían, ahora se maquillan y hasta se queman los tatuajes para no ser reconocidos, antes las pandillas obligaban a la gente a dejar su hogar, ahora son ellos los que huyen, ahora la gente denuncia en nuestro call center y a nuestros oficiales.
Llevamos más de 36 mil mareros capturados e incautado miles de armas, millones de dólares en droga y efectivo, los vehículos decomisados a las pandillas ahora le sirven a la policía para convertir a las mismas pandillas», dijo Bukele en su discurso de 1 de junio.
La estrategia de seguridad del Gobierno cuenta con el respaldo de más del 91% de los salvadoreños, tal y como fue confirmado por encuesta de CID-Gallup.
