A setiembre de este año, Recope ha intervenido 73 tomas ilegales.
Redacción: La Refinadora Costarricense de Petróleo, Recope, anuncio este martes que insta a la población a denunciar la toma de combustibles de forma ilegal.
“Instamos a todos los costarricenses a llamar a la línea telefónica 1-0-0-2. Cualquier sospecha de almacenamiento, transporte de combustible de manera ilegal lo pueden hacer en ese número de teléfono.» Aseguró Sergio López, jefe de comunicación de Recope.
La entidad asegura que el gran aliado en contra del robo de combustible lo constituye el costarricense, quien cada vez más denuncia este tipo de delitos y permite dar con los delincuentes.
Según recope, varias de las denuncias recibidas de manera confidencial, señalan sospechas de personas transportando combustible en pichingas, tanquetas y camiones, olores fuertes de combustible en una propiedad y movimientos sospechosos y extraños de vehículos que transportan combustible. Ello ha permitido dar con los delincuentes de una forma eficaz.
El ministerio público aseveró que en lo que va del año, los tribunales de Justicia han sentenciado a 14 personas con penas de prisión por este delito.
Siendo el 2018, el robo de combustibles ascendió a casi 8.000 metros cúbicos. Ese fue el año en el que los delincuentes robaron más combustible al país.
Según datos del Departamento de Trasiego de Recope, para este año, esa suma se ha logrado reducir en un 86%; registrándose a setiembre de este año un volumen sustraído de 1.065 metros cúbicos.
De enero del 2018 al 15 de setiembre del 2022, Recope ha desarticulado 903 tomas ilegales, asociadas al robo de 21.057 m3. Por su parte, el 2019 fue el año con más tomas ilegales intervenidas (442).
A setiembre de este año, Recope ha intervenido 73 tomas ilegales, lo que significa un aumento del 45% de tomas ilegales desarticuladas, en comparación con el año anterior (40), lo que refleja la efectividad con la que se trabaja para atender esta problemática.
Implicaciones del robo de combustible
Lejos de las implicaciones económicas que este tipo de delitos conllevan para todos los costarricenses, lo que más preocupa es:
Que se ponga en peligro la vida de las personas que viven en las comunidades aledañas por la irresponsable manipulación del poliducto, el almacenamiento ilegal de combustibles en viviendas, predios y camiones.
Que haya un accidente que afecte la continuidad en el suministro de combustibles en el país, que provoque desabastecimiento.
Que haya contaminación al medio ambiente, daños a la biodiversidad y afectación a la salud de las personas por la contaminación de mantos acuíferos.