La cena del día previo a esta actividad debe contar con una cantidad adecuada de carbohidratos.
Redacción- Desde el Colegio de Profesionales en Nutrición (CPN) piden a los romeros prepararse por lo menos una semana antes de emprender su caminata hacia Cartago, pues el cuerpo demanda de consumo de calorías y esfuerzo físico. Afirman que con una adecuada preparación se disminuye el impacto que esta actividad pueda tener en el cuerpo.
Esto implica hacer una buena recarga de carbohidratos consumiendo alimentos como arroz, papa, yuca, plátano, panes, galletas y frutas en pieza o en jugo.
De hecho, uno de los principales errores que suelen cometer los romeros, es la falta de planificación. La Dra. Josabeth Azofeifa, representante del Colegio de Profesionales en Nutrición, explica que “se debe tener una adecuada preparación sobre la alimentación que se tendrá tanto previo como durante la caminata, para contar con la adecuada energía que se requiere para realizar esta actividad”.
Omitir realizar este primer paso puede incidir incluso en el peso del bolso que se lleva, traducido en una carga excesiva innecesaria, que a la vez tiene otras afectaciones físicas, aseguró la representante del CPN.
El tema de la hidratación es un punto sensible en el que los nutricionistas hacen mucho enfásis, recordando que es necesario proveer suficientes líquidos al cuerpo, lo que implica no solo ingerir agua sino también bebidas hidratantes que aporten electrolitos como cloruro, sodio y potasio, que son importantes para el buen funcionamiento de nervios y músculos y que pueden ser encontrados en alimentos como agua de pipa o jugo de tomate.
Se sugiere realizar un constante monitoreo de la coloración de la orina, procurando que estén en tonos muy claros para asegurarse del nivel de hidratación y también, no esperar a tener sed para ingerir los líquidos.
En cuanto a la alimentación como tal, es fundamental cuidar una correcta ingesta de carbohidratos, que son los que proporcionan energía y permiten tener reservas adecuadas de glucógenos muscular. Para lograrlo, se recomienda por ejemplo, cenar la noche previa a la caminata platillos como pasta en salsa de tomate con proteínas que sean bajas en grasa como pollo, atún o queso.
Se debe evitar proteínas altas en grasa, tanto antes como durante la romería y por el contrario, consumir carbohidratos simples como panes, mermeladas o jugos de frutas.
Asimismo, se recuerda la importancia de no dejar de lado las frutas que aportan azúcar natural y preferirlas sobre otros alimentos industrializados como gaseosas, que de paso pueden provocar cólicos durante la caminata.
La Dra. Azofeifa agrega que otro de los errores comunes que se cometen y, a los que se pide prestar atención, además de la falta de planificación en la alimentación y la deshidratación; es no acatar alguna contraindicación médica en caso de aquellas personas que tengan una condición de salud especial como los diabéticos.