Redacción- Esta tarde de martes, los oficiales sospechosos de atropellar y matar a un perrito en Goicoechea se enfrentaron a una audiencia judicial.
Todos los seguidores del caso y defensores de animales esperaban que los policías quedaran tras las rejas; sin embargo, su deseo no se les cumplió.
Los oficiales quedarán en libertad, pero deberán cumplir con una serie de medidas cautelares.
El Tribunal de Flagrancia Segundo Circuito Judicial de San José determinó que los policías deberán ser trasladados de su lugar de trabajo y deberán evitar tener contacto con denunciantes o testigos del proceso.
«Se ordenó a petición de la Fiscalía la medida cautelar de traslado a otra delegación y abstenerse de comunicarse con denunciantes y testigos del proceso», informó el Poder Judicial.
Los oficiales son investigados por los delitos de muerte de animal, incumplimiento de deberes y ofrecimiento de dinero, pues habrían intentado pagar a los vecinos para que no denunciaran el hecho.
El caso ocurrió el pasado viernes 9 de agosto, cuando se dos patrullas de la Fuerza Pública atropellaron al perrito cuando dormía sobre la calle.
