Redacción- Gary Stevens, de 55 años, fue sentenciado a cuatro años y medio de prisión en el Tribunal de la Corona de Derby, Inglaterra, tras la trágica muerte de su hermano menor, Wayne Stevens, a manos de su perro, Ace.

El ataque ocurrió en la madrugada del 22 de abril de 2023, cuando ambos hermanos estaban bajo los efectos del alcohol.

El tribunal escuchó que Gary era consciente de la agresividad de Ace, quien había mordido a varias personas y animales anteriormente, aunque esos incidentes no fueron reportados. A pesar de ello, Gary minimizó la situación, describiendo los ataques previos como “mordiscos” y sugiriendo que el comportamiento de su hermano pudo haber desencadenado el ataque de Ace.

Wayne, de 51 años, sufrió lesiones «múltiples, masivas y horribles» durante el ataque, y su cuerpo fue encontrado al pie de una escalera. Un testimonio en el juicio destacó la negligencia de Gary al no tomar precauciones para evitar que su perro atacara.

La situación se volvió caótica cuando los servicios de emergencia llegaron al lugar. Gary, en estado de ebriedad, llamó al Servicio de Ambulancias de East Midlands para informar sobre el ataque. Sin embargo, Ace se interpuso entre los rescatistas y la víctima, y Gary se mostró agresivo hacia los oficiales que intentaban controlar la situación. A pesar de los intentos de calmar al perro, Ace atacó a un paramédico antes de que las autoridades decidieran sacrificarlo para evitar más tragedias.

El detective Stevie Barker, encargado de la investigación, subrayó la responsabilidad que conlleva tener un animal y la negligencia de Gary en el cuidado de Ace. La policía confirmó que el perro había sido entregado a Gary por una mujer que no podía controlarlo, y él mismo admitió que había tenido que sujetarlo en público en varias ocasiones.

Barker expresó sus condolencias a la familia Stevens y destacó el profundo impacto que el incidente ha tenido en ellos. La tragedia subraya la importancia de la responsabilidad en la tenencia de mascotas y las consecuencias de ignorar señales de comportamiento agresivo en los animales.