San José – Tambaleada inició la semana el gobierno de la República tras la renuncia de dos importantes jerarcas del gobierno: el ministro Carlos Villalta y la viceministra Guisselle Alfaro, ambos del Ministerio de Obras Públicas y Transportes.
Villata, renunció la mañana de este lunes tras una polémica relacionada por una denuncia de su esposa por una aparente violencia doméstica. La mujer denunció que el exjerarca la intentó ahorcar; sin embargo, el ministro lo negó.
No obstante, la Fuerza Pública confirmó que la mujer presenta moretes en sus brazos.
Esta mañana, el presidente confirmó que solicitó la renuncia de Villalta, para ‘evitar que el gobierno se vea atrapado en una situación privada’.
La salida de Villalta representa un golpe para Casa Presidencial, en virtud de que es el segundo ministro que ocupa la cartera en el gobierno de Luis Guillermo Solís. Primeramente había sido ocupada por Carlos Segnini, quien renunció también tras un paso polémico en el ministerio.
Además, de que el gobierno había afirmado hace varias semanas que para estos últimos 11 meses de gobierno habían obras públicas como prioridad, aunque ahora el titular del cargo se ve tambaleado.
Por otra parte, Solís también confirmó que esta mañana recibió la renuncia de la viceministra del Mopt, Guisselle Alfaro.
Según Presidencia, renunció por motivos personales. Alfaro cargaba en sus hombros el desarrollo de proyectos relacionados con obra pública, pues su cargo era viceministra de Infraestructura.
Ante la renuncia de dos medulares jerarcas del gobierno, por su importancia en la construcción de obra pública, el presidente dijo que para este año hay que seguir adelante con los proyectos planteados.
«No es una coincidencia feliz, pero Guisselle es funcionaria del ministerio y continuará trabajando en su puesto. Solo renunció al viceministerio. Hay desafíos especiales para este año», comentó el presidente.
La semana anterior, Solís también destituyó a la presidenta ejecutiva de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), María del Rocío Sáenz, por no atender la solicitud de que se suspendiera el aumento de 1% en las cuotas del régimen IVM de pensiones.