Redacción- La Arquidiócesis de San José abrió una investigación contra el sacerdote costarricense Mauricio Antonio Víquez Lizano, denunciado por tres abusos sexuales contra personas menores de edad.

Ante esta situación, Monseñor José Rafael Quirós, arzobispo de San José, ordenó la inmediata investigación y aplicar las medidas cautelares correspondientes contra el cura, por lo que no puede ejercer su ministerio sacerdotal.

El caso tiene relación con una denuncia presentada por tres hombres, hoy adultos, quienes afirman haber sido víctimas de abusos sexuales por parte de Víquez Lizano, dichas denuncias fueron presentadas el 15 de mayo anterior.

De acuerdo con la propia iglesia, los hechos habrían sucedido hace 20 años atrás en comunidades en las cuales el sacerdote trabajó.

La denuncia y pruebas obtenidas por la Arquidiócesis será enviada este martes 21 de agosto a la Santa Sede, específicamente a la Congregación de la Doctrina de la Fe, instancia responsable de juzgar estos delitos.

En cuanto a los hechos, se dieron, supuestamente, cuando los hoy denunciantes tenían entre 13 y 16 años. La iglesia le pide a padres de familia o afectados de hechos similares, que presenten denuncias ante la Cancillería de la Curia Metropolitana.

Con ello, la jerarquía de la Iglesia Católica reafirma su compromiso en la lucha contra el abuso sexual y se solidariza con las víctimas de estos delitos que califican como graves e injustos. 

En el año 2016, este mismo religioso había sido vinculado con supuestos encuentros homosexuales, en ese entonces también recibió medidas que le impidieron continuar con sus labores.