San José – En el marco de la celebración del Día de la Abolición del Ejército, el gobierno inauguró este jueves la estatua de José Figueres Ferrer en la Plaza de la Democracia.

 Se trata de conjunto escultórico en bronce alusivo a don Pepe Figueres, el cual fue inaugurado en los actos de conmemoración del 68 aniversario de la abolición del ejército, con presencia del presidente Luis Guillermo Solís.

El conjunto está compuesto por cuatro esculturas en bronce, una niña que representa la cultura, un niño que simboliza la educación, un mazo como alegoría de la abolición del ejército, y la imagen del hombre que impulsó grandes reformas.

Juntas son el monumento que representa a “Pepe” Figueres, el cual fue restaurado tanto por especialistas del Museo Nacional como por voluntarios, dirigidos por la restauradora Ana Eduarte y la artista y autora de la obra, Marisel Jiménez.

La estructura en donde estará colocada la obra tiene un costo total de ¢35 millones, de los cuales el ICE aportó ₵20.8 millones y Museo Nacional ¢15.6 millones.

Tanto el presidente Solís como la ministra de Cultura, Silvie Durán firmaron un decreto para que esa plaza ahora se llame Plaza de la Democracia y la Abolición del Ejército.

El monumento fue colocado en el año 1998 en la Plaza de la Democracia. Posteriormente fue retirado a inicios del 2007 debido a las obras de remodelación de la Plaza, durante la administración de Óscar Arias.

EDUCACIÓN EN VEZ DE ARMAS

Jose Figueres ejércitoUn 1 de diciembre pero de 1948, el caudillo José Figueres Ferrer cambió la historia de Costa Rica, al anunciarle al mundo que prefería la educación en vez de las armas.

Don Pepe, con un mazo en la mano dio en un muro del antiguo Cuartel Bellavista -hoy Museo Nacional- como símbolo de la abolición de ejército de Costa Rica.

En ese momento, el entonces presidente decidió tomar el dinero destinado al militarismo para invertirlo en educación y seguridad social. Además, representa la voluntad política de crear una sociedad civilista sin militares, sin ejércitos.

El gobierno de Luis Guillermo Solís presentó un proyecto en las sesiones extraordinarias para cambiar el feriado del 12 de octubre y pasarlo al 1 de diciembre, en virtud de la importancia de la fecha.