Redacción. El proyecto del Sistema y Almacenamiento de Gas Licuado de Petróleo (SAGAS) marcha a todo gas al haber entrado en operación dos esferas y estar próxima a entrar en funcionamiento una tercera, lo que representa un avance del 80.33% de la obra.

El crecimiento promedio de la demanda de gas licuado de petróleo (GLP) es de un 9,5%, como se desprende del último informe anual de ventas a diciembre del 2016.

Este proyecto consiste en la construcción de 5 esferas de 25 mil barriles (4000 metros cúbicos) cada una y 6 recipientes cilíndricos horizontales. La empresa que ha estado a cargo del proyecto es la compañía Felguera IHI S.A. (española).

La primera fase del proyecto consistió en la construcción de una esfera y seis recipientes horizontales. La esfera 7711 cuenta con una capacidad de 4 000 m³ (25 000 barriles). Se terminó y entró en operación en el año 2013, tuvo un costo de $12 millones. En el 2014 se concluyó la fase constructiva y puesta en marcha de seis recipientes cilíndricos horizontales (conocidos como salchichas)  que forman parte de SAGAS. Su costo fue de $10.481.266.

La tercera etapa comprendió la edificación de cuatro esferas, con un costo estimado de $ 48.974.296,96. El pasado mes de julio entró en operación la esfera YT 7712, y en setiembre lo hizo  la esfera YT-7713 y próximamente lo hará la YT 7714.

Para principios del 2018 se espera que entre a operar la YT 7715. Al completar estas instalaciones se incrementará la capacidad instalada de almacenamiento a 24.500  m³  (154 000 Barriles) que en la actualidad es de 10.500 m³ (65 000 barriles).

El GLP es un producto que se ha posicionando en el mercado como un combustible más limpio en términos de emisiones al ambiente, y por lo tanto, se ha propiciado un proceso de sustitución por parte de la industria nacional del consumo de búnker por GLP en sus procesos productivos.

Hasta hoy este producto se destina principalmente a sectores como la industria alimentaria que va asociada al desarrollo turístico nacional y a los hogares para la cocción de alimentos. También se requiere en hospitales, comedores escolares y complejos carcelarios, entre otros.