Redacción – El presidente de Burundi, país que se ubicado en África Oriental, Pierre Nkurunziza, quien gobierna esa nación africana desde el año 2005, gusta de jugar al fútbol, pero todo indica que es un mal perderdor, porqué después del último amistoso que disputó mandó a arrestar al entrenador y al auxiliar del equipo rival.
Nkurunziza envío a prisión a los entrenadores acusándolos de «conspiración contra el presidente de la república», pues él consideró que dieron la orden para que los jugadores marcaran muy fuerte al mandatario burundés, que le hicieran faltas y que no lo dejaran seguir con su racha goleadora.
El mandatario de Burundi suele viajar con su equipo de fútbol, el Haleyuya FC, y en el último amistoso se trasladó hasta el poblado de Kiremba, donde varios de los jugadores rivales no lo conocían, por lo que lo marcaron sin piedad y le causaron mucho daño.
Esa marca férrea provocó que el enojo del gobernante de la nación ubicada en el continente africano.
Al final del cotejo, el presidente, molesto por el comportamiento de los rivales, actuó en contra del técnico y de sus asistentes y los mandó a apresar.
Varios jugadores del equipo rival eran refugiados de la República Democrática de El Congo, otra nación africana, y no lo conocían por eso fue la marca tan fuerte que le hicieron al líder de la nación africana.