Redacción – La diputada electa por el Partido Unidad Social Cristiana Shirley Díaz, en el segundo día de análisis del informe de labores del presidente Luis Guillermo Solís, aprovechó el espacio para criticar el accionar durante su gestión.
Durante su intervención, relató que conoció al aún mandatario cuando fue su profesor en la Escuela de Ciencias Políticas de la Universidad de Costa Rica. Según la socialcristiana, vio en él a un historiador brillante y con un alto sentido humanista, pero que durante estos cuatro años, pasó por alto los temas de descomposición social más profundos del país.
Para ella, el gobierno del presidente Solís se enfocó en las guías sexuales y en la ideología de género pero no en los temas de seguridad social que afectan a la mayoría.
«Se enfocó en las guías sexuales fundamentadas, en la ideología de género, pero el bullying y la falta de autoestima de nuestros adolescentes siguió creciendo, así como las muertes por causa de este lamentable cáncer social. El homicidio, los femicidios y los suicidios aumentaron. Aumentó la violencia de los asesinatos, aumentó la indigencia y el sicariato», indicó Díaz.
La legisladora se ha caracterizado por ser una gran defensora de la familia como núcleo de la sociedad, por lo que rechaza, en todas sus formas, cualquier elemento que atente contra ella.
Continuó su alegato, haciendo referencia a la interpretación de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en relación con el matrimonio igualitario. Afirmó que esto provocó un ambiente de agresiones entre los que estaban a favor y en contra y, al final, generó un mayor distanciamiento entre la ciudadanía.
«La inesperada resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en un mal llamado acto de inclusión, en la cúspide de la campaña electoral, entró en la escena política provocando insultos y exclusiones. A espaldas de la ciudadanía y sin ningún respeto, utililizaron la agenda LGTBI con fines electorales para producir polarización», concluyó.
Comienza a salir la verdad a flote. La verdad pica e incomoda pero es la verdad la que libera y no esclaviza.
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