Redacción – Todas las selecciones llegan con el objetivo de realizar una buena participación y, en algunos casos, tentar el trofeo y ser los nuevos campeones del torneo mundial. Dentro del certamen, resalta el equipo de Marruecos, no por su nivel de fútbol, sino por otro detalle curioso.
Marruecos, tendrá como curiosidad principal, que más de la mitad de sus convocados no nacieron en el país africano que se caracteriza por sus desiertos y maravillosos paisajes.
La selección marroquí, cuenta con 16 de los 23 convocados a Rusia 2018 son provenientes de otra nación. Solo siete convocados han nacido en el país africano.
Los jugadores nacionalizados marroquís son los arqueros Yassine Bounou y Munir Mohand Mohamedi; los defensas Achraf Hakimi Mouh, Fouad Chafik, Mehdi Benatia y Romain Saïss.
Además, los mediocampistas Hakim Ziyech, Karim El Ahmadi, Younès Belhanda, Fayçal Fajr, Mbark Boussoufa, Youssef Aït Bennasser y Amine Harit.
Y por último, los delanteros Nordin Amrabat, Rachid Alioui y Khalid Boutaïb. La mayoría de estos jugadores son de Francia, con 9 futbolistas nacidos en ese país europeo.
Marruecos será liderada en Rusia 2018 por el experimentado entrenador francés Hervé Renard, quién ha llevado a Los «Leones del Atlas» a cosechar una racha de 18 partidos sin perder, con 14 victorias.
Clasificaron a Rusia 2018 después de vencer a Guinea Ecuatorial en segunda ronda y a Costa de Marfil, Gabón y Malí en tercera ronda. Con esto, los marroquís regresan a una Copa del Mundo después de 20 años.
Khalid Boutaïb, futbolista del Yeni Malatyaspor de Turquía, fue el goleador del equipo en la eliminatoria, con cuatro goles.
En Rusia 2018, los marroquís integran el grupo B, junto a Portugal, España e Irán. Los africanos debutan este viernes ante los iraníes, con la esperanza de clasificar a octavos de final.