Redacción – El Mundialista de Irán en Rusia 2018, Sardar Azmoun renunció a la selección iraní por bullying cibernético tras no tener un buen desempeño con su país en la justa universal.

El bullying cibernético le ha costado a Irán la pérdida de uno de sus mejores jugadores en los últimos tiempos.

Sardar Azmoun dijo el jueves que no volverá a la selección nacional. El delantero de 23 años fue víctima de numerosos ataques en redes sociales después de no marcar en ninguno de los tres partidos de Irán en el Mundial.

Recibió mensajes obscenos y burlas por su supuesta falta de impacto durante el torneo.

Azmoun dijo que su madre se estaba recuperando de una grave enfermedad, pero los insultos le provocaron una recaída. “Escojo a mi madre” por encima del fútbol, escribió el jugador en Instagram.

El atacante del Rubin Kazán de Rusia llegó al campeonato del mundo como la mayor amenaza del equipo persa y tiene 23 goles en 36 apariciones con su representativo nacional.

Azmoun es conocido en su país como el Messi Iraní, debido a sus grandes cualidades a la hora de saltar a la cancha con su combinado nacional.