Redacción– El estrés laboral se ha convertido en uno de los grandes males del Siglo XXI. Según estimaciones del investigador Jeffrey Pfeffer, profesor de la Escuela de Postgrado de Negocios de la Universidad de Stanford y autor del libro «Muriendo por un salario», y recopiladas por el Foro Económico Mundial, solo en Estados Unidos, 120.000 trabajadores mueren anualmente por causas asociadas al estrés.
Además, en su informe del año 2016: “Estrés en el trabajo: Un reto colectivo”, la Organización Mundial del Trabajo (OIT) señaló que “los elevados niveles de estrés pueden contribuir al deterioro de la salud, incluidos los trastornos mentales y de comportamiento como el agotamiento, el burnout, el desgaste, la ansiedad y la depresión, además de daños físicos, como enfermedad cardiovascular y trastornos musculo esqueléticos”.
Pero, ¿cómo se da el estrés? De acuerdo con expertos, este padecimiento aparece cuando la presión que existe dentro del entorno de trabajo se hace excesiva, muy intensa o difícil de controlar y que además se mantiene durante prolongados periodos de tiempo, rebasando las disponibilidades energéticas fisiológicas y psíquicas de la persona.
Precisamente, el Estudio sobre Estrés Laboral 2019 realizada por Woolax, empresa especializada en el desarrollo de experiencias de relajación con realidad virtual, encontró que el 65% de los trabajadores considera que su nivel de estrés es alto o muy alto, casi un 60% declara haberse planteado cambiar de trabajo a causa del estrés y un 48% haber discutido con compañeros.
Además, el 79% defendió que el trabajo es su principal fuente de estrés.
Es en este contexto que toma cada vez mayor relevancia que los empleadores apliquen dentro de sus organizaciones medidas más directas para reducir los niveles de estrés de sus colaboradores.
Asimismo, que las personas busquen opciones que les permita manejar de mejor forma este padecimiento para evitar otras consecuencias.
De acuerdo con Lis Pérez, esteticista profesional, el estrés laboral es un efecto que va acumulándose con el tiempo y puede producir distintos problemas, por lo que tratarlo a tiempo es sumamente importante. Agregó que una opción para lograrlo son los masajes relajantes.
“Cuando se realiza un masaje relajante aplicando las técnicas correctas, se logra aliviar el estrés emocional, des contractura y relaja los músculos, aumenta la circulación de la sangre eliminando los productos de desecho acumulados en el torrente sanguíneo, reduce el ritmo cardiaco y la presión sanguínea.
Además, disminuye los dolores corporales ya que al estimular la circulación de la sangre los nutrientes y el oxígeno que circulan por ella llegan con mayor rapidez a las zonas necesitadas del cuerpo”, explicó Pérez.
Además de estos beneficios, la experta comentó que tratar el estrés con masajes relajantes ayuda a que el trabajador tenga un incremento en su productividad y rendimiento laboral, disminuye el ausentismo, motiva al personal y mejora las relaciones laborales, alivia el estrés tanto físico como intelectual y reduce las tenciones musculares mejorando el esquema corporal.
Aunque las técnicas de masaje que se vayan a utilizar para tratar el estrés varían del caso concreto de cada persona y sus necesidades, Pérez considera que la aplicación de rituales que combinen técnicas de aromaterapia con productos para aliviar la tensión muscular y corporal, son los más efectivos ya que se trabaja la parte emocional y física de la persona a la vez.
Estas técnicas pueden focalizarse en zonas del cuerpo como cabeza, cuello, espalda dorsal, lumbar y sacra, hombros, brazos y manos.
De acuerdo con Pérez, es recomendable que las personas se realicen un masaje relajante de al menos 1 hora una vez al mes como mínimo, para que así puedan controlar de forma más efectiva el estrés laboral.
Lis explicó que las personas deben estar alertas a varias señales que pueden indicarle que sufren de estrés laboral o están a punto de hacerlo.
Entre estas están: ansiedad, agresividad, apatía, aburrimiento, depresión, fatiga, sentimiento de culpa, vergüenza, mal genio, tristeza, baja autoestima, tensión, nerviosismo y sensación de soledad.
Además, Pérez comentó que las personas trabajadoras que enfrentan estrés laboral pueden ser distraídos, presentar disminución de la memoria, cometer errores en su trabajo, presentar tensión muscular, sentirse nerviosos, intolerantes e irritados; además, puede provocar un aumento en la ingesta de alcohol y medicamentos sin prescripción médica.
“Estudios han señalado que un 36% de la población entrevistada manifiesta que laborar más de 48 horas semanales, esto sin contabilizar el tiempo adicional dedicado al traslado de su residencia al lugar de trabajo y viceversa, puede incidir en la conciliación del trabajo con la vida personal y familiar, generando en ocasiones conflictos, sensación de impotencia y fatiga, depresión inclusive la muerte”, afirmó Pérez.
La sociedad necesita aprender a gestionar el estrés, pues este afecta a la mayoría de las personas hoy en día. Los masajes terapéuticos y masajes relajantes se vuelven un gran aliado para lograrlo gracias al impacto positivo que tienen casi de inmediato a nivel físico y mental en las personas.
“Está comprobado además que el contacto puede estimar o relajar el sistema nervioso de las personas. Los masajes impactan favorablemente las emociones del ser humano, debido a que reducir las tensiones musculares mejora el estado anímico.
Por eso, el masaje suele ser el indicado para casos de ansiedad, agitación nerviosa y altos niveles de estrés, como el laboral”, concluyó Pérez.