Redacción- Más de dos millones de casos sospechosos de dengue en toda América, ponen en jaque a las autoridades de la salud del continente y exigen la pronta implementación de medidas para prevenir un mayor avance de esta enfermedad.
Costa Rica reporta un aumento de los casos de un 101.6%, durante los primeros siete meses del año y con respecto al mismo periodo de 2018. La cifra es de 2.849 casos, siendo la región Central Norte la más afectada, de acuerdo con datos del Ministerio de Salud.
Frente a este escenario, en nuestro país los expertos piden a la población no bajar la guardia y acatar al pie de la letra, las recomendaciones dadas.
“Estamos frente a la época lluviosa y esto puede aumentar aún más el número de enfermos, debido a que se genera una importante acumulación de agua, que sirve de hogar para el mosquito Aedes Aegypti. Por ello, es aún más urgente poner en práctica una serie de medidas de prevención, entre ellas, prácticas farmacológicas que previenen la picadura del mosquito”, explica la doctora Natalia Bastos, decana de Farmacia de la Universidad de Ciencias Médicas, UCIMED.
Si bien es cierto, es indispensable disminuir o erradicar los criaderos del mosquito, a través de diversas prácticas, el uso de repelentes contra insectos es clave y de su correcta aplicación dependerá la efectividad en la protección.
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“Es importante utilizarlos de forma segura, principalmente, al administrarlos en niños, adultos mayores y mujeres embarazadas. Los repelentes sólo deben colocarse en la parte de afuera de la ropa y en la piel que queda expuesta. Aquellos productos que contienen Permetrina en su formulación, no deben aplicarse en la piel”, detalla Bastos.
Los repelentes de insectos se comercializan en distintas presentaciones, tales como aerosoles, atomizadores, líquidos, cremas y barras. Algunos están fabricados con productos químicos (como el DEET) y otros contienen ingredientes naturales.
Aunado a estos esfuerzos, Bastos señala que se deben acatar las recomendaciones básicas para erradicar los criaderos del mosquito, tales como:
- Desmalezar patios y jardines
- Reutilizar latas, botellas, neumáticos y objetos para que no acumulen agua
- Tapar tanques de agua
- Cambiar, con frecuencia, el agua de floreros y bebederos de animales
- Realizar un periódico raspado y limpieza de las canoas