- Expertos consideran necesario realizar cambios e implementar una atención humanizada en todos los servicios.
Redacción- Un 20% de los hospitales públicos de nuestro país, padece de serios problemas en su infraestructura y resulta de vital importancia atenderlos en el corto plazo.
Así lo confirman varios estudios, analizados por los representantes de la Asociación Costarricense de Arquitectura e Ingeniería Hospitalaria (ACOAIH), donde se detallan los problemas más relevantes en la mayoría de los 29 centros médicos del país.
La presidenta de ACOAIH Vania Ureña, confirma que los estudios realizados demuestran que los hospitales requieren mejoras sobre todo en proyectos de remodelación, cambios en las instalaciones eléctricas (la potencia eléctrica), planes de reforzamiento integral de los complejos hospitalarios, rediseños arquitectónicos y reducción del riesgo sísmico.
“Parte de nuestro trabajo en la Asociación es abrir un espacio de diálogo y análisis pues muchas de las edificaciones actuales requieren una intervención en su infraestructura, principalmente en el sistema arquitectónico pues muchos de estos edificios fueron construidos hace más de 15 años y es en manos de diversos profesionales, que está el planificar, equipar, construir y remodelar los edificios que albergan no solo al personal que presta los servicios en salud, sino a los pacientes y a sus acompañantes”, aseguró Ureña.
Ureña admite que ningún hospital, salvo los que están en etapa de construcción, llegan al ideal en aspectos mecánicos, sistemas eléctricos, arquitectónicos o estructurales.
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Conociendo esta realidad, y dado que existen nuevos códigos eléctricos y sísmicos a implementarse en todo tipo de edificación, es que ACOAIH realiza desde este miércoles 18 de setiembre y hasta el viernes 20, el 5to Congreso de Infraestructura Hospitalaria en el hotel Crowne Plaza Corobicí, donde más de 20 expertos en distintos campos darán una visión sobre el futuro de las edificaciones y los nuevos equipos a utilizar en la prestación de servicios de la salud.
Ureña resaltó que si bien el eje principal de todo el sistema es la prestación de la salud, esa atención debe ser humanizada, desde la recepción del usuario, hasta su diagnóstico y recuperación, siendo el profesional en salud el medio para que la automatización y robotización de los procesos médicos sean cada vez más humanos.
