- El detenido también es tío del niño
Redacción – «Voy buscando a mi mamá», decía una nota que dejaron junto a un niño de 6 años abandonado en Arizona, en la frontera entre México y Estados Unidos. Ahora, un sacerdote de la Parroquia de Sardinal, de apellidos Brenes Villalobos, fue detenido como principal sospechoso de dejar ahí al menor.
El niño fue encontrado por agentes migratorios estadounidenses el 21 de junio 2018, posterior a que saliera de forma regular de Costa Rica, con el permiso de salida correspondiente y pasando los controles migratorios.
Estaba sentando con una gaseosa, un bulto y la nota, bajo las altas temperaturas del desierto.
Brenes fue detenido por el delito de tráfico Ilícito de Migrantes y abandono de incapaz, en perjuicio de su sobrino, esto bajo dirección funcional de la Fiscalía Adjunta Contra la Trata de Personas y Tráfico Ilícito de Migrantes.
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Fue detenido por oficiales en plena vía pública en la zona de Sardinal, frente a la Casa Cural, en el cantón de Carrillo, Guanacaste y trasladado vía terrestre hacia Liberia.
Será trasladado vía aérea a San José, para ser remitido al I Circuito Judicial.
El mismo niño declaró que su tío le dijo que continuara solo, pues luego sería «rescatado».
“De acuerdo con el reporte oficJial de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos, el menor respondió a los agentes que fue dejado en el lugar por uno de sus tíos, quien en la frontera le solicitó que continuara solo, porque en algún momento sería rescatado”, comunicaron el año pasado desde la Cancillería de la República.
Investigación y abandono
De acuerdo a la investigación iniciada a principios de julio 2018, Brenes promovió, coordinó y ejecutó el traslado ilícito en México del menor, a quien aparentemente abandonó en la línea fronteriza entre México y Estados Unidos, en la zona de Luckeville.
El ahora detenido, aparentemente, llevó a su sobrino hasta México vía aérea el 18 de junio del año pasado, y mediante vuelo interno se dirigieron hacia Hermosillo, capital del estado de Sonora, ciudad mexicana ubicada a 287 kilómetros de la frontera entre Estados Unidos y México.
Según la información de las autoridades estadounidenses, lo abandonó en el desierto, atentando directamente contra la vida y la salud del menor. Ese mismo día Brenes regresa a Costa Rica.
“La Policía de Migración, al tener conocimiento de la situación del menor de edad, y de acuerdo a los compromisos que la institución ha adquirido en materia de protección a la niñez, realiza la apertura de esta investigación por exponer a un menor costarricense a peligros extremos y abandono”, señala Stephen Madden, director de esta unidad policial.
