- A nueve de cada diez niñas se les aplicó la primera dosis
Redacción- Las niñas de diez años, que recibieron la primera dosis contra la vacuna papiloma en junio, deben acudir a ponerse la segunda dosis a partir de este mes de diciembre,con el objetivo sellar la protección contra los virus papiloma que más frecuentemente producen el cáncer de cérvix y las verrugas.
Las familias deben prestar atención a las siguientes indicaciones:
- La primera dosis se aplicó en la escuela, sin embargo, la segunda dosis será en el Ebáís donde usualmente es atendida la niña.
- Los padres de familia o encargados deben presentarse en el ebáis con el carné de vacunación donde esté registrada la primera dosis y la identificación de la menor.
- La vacuna contra el virus papiloma consta de dos dosis, entre una y otra deben haber pasado seis meses. Por lo tanto, es mejor que vaya al ebáis el mismo día que fue vacunada en junio. Por ejemplo, si la vacunaron el 3 de junio ir el 3 de diciembre, si fue el 10 junio irá el diez de diciembre y así sucesivamente.
La vacunación es obligatoria para todas las niñas que nacieron en el 2009 y para todas ellas el medicamento está garantizado gracias a la inversión de $4.3 millones que ha realizado la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), con el propósito de fortalecer las acciones contra el cáncer de cérvix.
Las familias han reconocido los beneficios de la vacuna y masivamente se han sumado a la protección de las niñas: nueve de cada diez ya se han recibido la primera dosis. Los efectos son los esperados, solo algunas han manifestado molestias pasajeras. Según la experiencia internacional las niñas pueden sentir las mismas molestias de la primera dosis o, incluso, puede que esta vez no las tengan.
Muy pocas familias han manifestado reservas sobre la vacunación y ellas se han reportado al Ministerio de Salud. Mientras tanto los equipos de salud continúan la gestión de vacunar en las comunidades, haciendo recorridos casa por casa para alcanzar a las niñas que todavía no han recibido la primera dosis porque, quizás, no asistieron a clases durante la visita escolar.
También es posible que la niña haya festejado el cumpleaños en noviembre después de que los equipos de salud visitaron la escuela o, que ellas cumplan años en diciembre. En esos casos, ellas recibirán la primera dosis el próximo año, porque ellas también tendrán diez años cuando vuelvan a pasar los equipos de salud a las escuelas.
La doctora Leandra Abarca Gómez del Programa institucional de inmunizaciones señala la importancia de sellar la protección: “con la segunda dosis sellamos la protección y las niñas cumplen con esa vacuna el esquema básico que el país les ofrece para protegerse de enfermedades potencialmente mortales”.
La doctora envía un mensaje a las niñas: “que sellen la protección personal con la segunda dosis y que recuerden vacunar a sus hijos en el futuro como hicieron los padres con ellos porque esa es la manera de dar un regalo de amor para toda la vida”.