Redacción. La iniciativa anunciada por el presidente de la Caja Costarricense del Seguro Social, Román Macaya, para que se incluya en las comunidades es un plan de vigilantes es muy riesgoso para el país, denunció el presidente del Congreso, Eduardo Cruickshank.
“Hemos apoyado muchas de las acciones de las autoridades de Salud, pero en este caso nos parece que se extralimitan y podrían poner en riesgo la libertad de los costarricenses”, dijo Cruickshank.
El Presidente del Congreso aseguró que “este tipo de medidas pueden prestarse para abusos y podrían ser una especie de control que no es propio de un país democrático como el nuestro”.
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“No ha sido buena la experiencia en otros países de tener ciudadanos que se convierten en informantes y vigilantes de sus vecinos; es un tema muy delicado, en el que el país no se puede aventurar”, concluyó Cruickshank.
Este fin de semana, el presidente de la CCSS informó que se planea tener “detectives del Covid-19” y que esta función la cumplirán líderes comunales, que permitirá al Gobierno tener información sobre lo que ocurre en los barrios.