- La sala de su casa se convierte en salón de baile
- La pareja de cincuentañeros busca transmitir positivismo durante momentos tensos
Redacción – Dicen que hay que sonreírle a la vida, además de vivirla bailando… eso es lo que hacen Jaqueline Castillo y Óscar Vargas, dos enamorados que enfrentan la cuarentena con mucho ritmo.
Ambos se conocieron justamente en un salón de baile, de esos que ya no se ven en la capital, y desde entonces, no han dejado de bailar.
Castillo publica a diario un vídeo de ellos bailando alguna pieza que los cautive, incluso algunas canciones se las pide su público, es decir, sus amigos de Facebook.
La bailarina amateur conversó con AMPrensa.com y nos transmitió todo su positivismo al contarnos por qué baila sin parar.
«Al que le gusta el baile, siempre le va a gustar. Esta es una forma para motivar la gente, como para decirles ‘quédate en casa y cuídate’. Hay que seguir adelante, la vida hay que verla en positivo», comentó Castillo a AMPrensa.com.
Ella resalta que la vida se trata de disfrutarla y de vivirla, porque solo hay una. Es por eso que a diario publican vídeos bailando desde bolero hasta folklor costarricense.
Y es que no solo se graban bailando, sino que también se arreglan con elegantes trajes y acondicionan la sala de su casa para convertirla en salón de baile.
Incluso, en uno de los vídeos, ella se vistió de campesina y en otro se puso una peluca. Él, por su parte, usa elegantes sombreros.
«Lo bonito es que la gente nos pide que le bailemos. A Óscar le piden que músicos nacionales que bailemos peizas de ellos», agregó a este medio.
Los vecinos de San José no aprendieron a bailar en una academia, sino «tirándose al agua». Desde muy jóvenes les ha gustado el baile y ambos tienen mucho talento en los diferentes ritmos que publican.
Para ellos, bailar es sanar y expresar lo que sienten.
«No podemos echarnos a morir. Hay que vivir como si fuera el último día. La vida hizo que nos encontráramos y aquí estamos… Hay que hacer lo que a uno le gusta, y con mucho amor. La situación está muy difícil, pero ha sido bonito compartir nuestro baile con otras personas», expresó Castillo.
Así que ya sabe… ¡la vida se vive bailando! Anímese a hacer lo que le gusta con mucha pasión, tal y como lo hacen Jacqueline y Óscar.