• Ella llama a familiares de pacientes fallecidos para explicarles el procedimiento
  • Trabaja de 10:00 p.m. a 5:00 a.m.

Redacción – Melania Chavarría tiene 28 años de edad y vive dos realidades que marcarán su vida por siempre: está embarazada de su segundo hijo y atiende a pacientes en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en plena pandemia.

Este próximo sábado Día de la Madre, cuando el reloj marque las 10:00 de la noche, la enfermera con cinco meses de embarazo ingresará a su jornada laboral UCI del Hospital San Juan de Dios.

Durante siete horas, deberá darlo todo con mucho compromiso, como lo ha hecho durante los últimos nueve años.

Al igual que todos, ella tuvo miedo al inicio de la pandemia, pues tiene una hija de 11 meses y aún está en período de lactancia.

Y es que poco después le confirmaron su segundo embarazo, por lo que el miedo aumentó.

La Dirección de Enfermería le dio la opción de cambiar de salón; sin embargo, ella valoró la situación y decidió quedarse en la UCI, pues asegura es el lugar donde está más segura.

«Al principio tuve mucho miedo y yo misma solicité el traslado, pero luego analicé y es el lugar más seguro donde puedo estar, siempre me cuido un montón, y mis compañero también me cuidan», dijo.

Desde la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) indicaron que la joven enfermera no ingresa dentro de los cubículos donde están los pacientes Covid-19 y su misión es coordinar todo lo que sus compañeros necesitan para trabajar.

El papel de Melania frente a los pacientes fallecidos

Esta enfermera y madre expresó que, lo que más le ha impactado, ha sido la muerte de pacientes, porque en algunos casos la persona está estable y se complica de un momento a otro.

«El médico residente llama a la familia para darle la noticia del fallecimiento, luego yo los tengo que llamar para darle todas las indicaciones de como retirar el cuerpo, eso es muy triste», agregó. 

Melania (izquierda) junto a sus compañeros de trabajo. Foto: CCSS

Chavarría vive el Covid-19 muy de cerca y por eso pide a los costarricenses que se cuiden y no rompan burbujas sociales para el Día de la Madre.

También piden que utilicen mascarilla y careta «porque esto no es un juego».

Su rol de madre y de enfermera

Esta vecina de Palmares labora de 10:00 de la noche a 5:00 de la mañana y viaja en bus.

Ella relató que siente más temor en el transporte público que en el hospital, porque las personas no utilizan la mascarilla y la careta de forma adecuada.

Para darle seguridad a su hija antes de ingresar a su casa se baña. Durante, utilizaba la mascarilla las 24 horas.

Chavarría junto a su burbuja. Foto: CCSS

Melania llega a su casa a las 6:30 de la mañana, se baña, y se mantiene despierta ocupada con algunas tareas del hogar y compartiendo con su pequeña hija.

A las 11 de la mañana llega su mamá y ella aprovecha para dormir.

En la Unidad de Cuidados Intensivos de hospital San Juan de Dios trabajan 60 personas que cubren los tres turnos y ninguno se ha contagiado con el virus.