Redacción- El caso de Solange se hizo viral porque la joven estaba enferma de cáncer y quería despedirse de su padre en Córdoba proveniente de Neuquén, Argentina.
La mujer tenía 35 años y esperaba ver a Pablo, que había viajado desde Neuquén y a quien las autoridades sanitarias de la provincia no dejaron ingresar por no presentar un hisopado negativo de COVID-19.
Tenía cáncer de mama en estado 4, tenía metástasis en los huesos, en el pulmón y en el hígado.
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Pablo Musse, el papá de la joven, le contó a Infobae que había salido el sábado 15 de agosto a las 20:00 desde Neuquén y que llegó al puesto de control sanitario de Huinca Renancó, en el límite sur de la provincia de Córdoba.
El domingo a las 6 de la mañana y fue allí donde le dijeron –luego de efectuarle dos pruebas rápidas por COVID-19 cuyos resultados, aseveró, eran “dudosos”– que no podría seguir el viaje sin presentar un certificado con el hisopado (PCR) con resultado negativo.
Según relató el hombre, había presentado toda la documentación correspondiente para viajar, incluido el pedido de circulación especial tramitado en Nación junto con el de su cuñada Paola, quien tiene una discapacidad motriz, por lo cual debe usar silla de ruedas.
A las pocas horas de difundida la noticia de que su padre no podía pasar, Solange difundió una carta en la que expresaba su dolor por no poder ver a su padre en las que, sentía, eran sus últimas horas de vida.
“Ansiaba ver a mi tía y a mi papá. Estoy muy triste por todo lo que les hicieron. Los trataron como si fuesen delincuentes. Espero que esto que le pasó a mi familia no le suceda a nadie más”, dijo.
Es importante mencionar que padre e hija no se veían desde marzo, cuando se implementó el aislamiento social preventivo y obligatorio.
