Redacción- Selene Agüero es hija del enfermo Hugo Agüero y narra el regreso de su padre al hospital y todo el protocolo que realiza cuando sale y entra de su casa.
La simpática mujer compartió con AM Prensa que su padre estaba de vacaciones y que esta semana inició de nuevo su adorado trabajo en el Hospital Monseñor Sanabria en Puntarenas.
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«Después de unos días libres que por rol le tocaban a papi, regresa al Hospital a hacer su trabajo en un contexto mundial y local que al menos en casa nos mantiene muy preocupados, por el hecho de que uno de los pilares de la casa estará nuevamente de frente a la enfermedad teniendo noción de ello.
Papi vuelve a su trabajo, y a la casa vuelven los protocolos de no besarlo ni abrazarlo antes de que se vaya, y de abrirle el portón y meterse corriendo a la casa, porque él no puede pasar por el mismo camino que usualmente recorre cualquier persona que entra a la casa, porque debe llegar al patio a despojarse de todo lo que lleva encima y podría estar «sucio», aunque es parte de los «pijamas verdes»», dijo Selene Agüero.
La hija del enfermero agrego que su padre se baña hasta 10 veces mínimo en un día y que la familia busca palabras diferentes para hablar de su trabajo.
También comentó que su padre al inicio de la pandemia le manifestó a la familia el temor de contagiarlos en caso de padecer el virus.
«Buscamos otras palabras para preguntar como le fue en su día de trabajo, para no hacerlo sentir pilas bajas porque vio algo muy duro mientras estaba en servicio, y también vuelve el inevitable repaso de confirmar cual podría ser el lugar de estancia de Papi en caso de que necesite hacer cuarentena.
Pa ama lo que hace, y su don de servicio y de gente es lo que siempre buscamos heredar todas en casa», añadió.
Es importante resaltar que tiene 33 años de servicio con la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y de esos años ha trabajado 20 años en enfermería.
«Aquí seguiremos orando y confiadas en Dios de que todo funcionario de salud que al igual que Papi es parte de esta atención de salud histórica, están acompañados de Dios y de su voluntad, que siempre es buena, agradable y perfecta», finalizo.
