Redacción. Los diputados de oposición: Dragos Dolanescu, Franggi Nicolás y Jonathan Prendas criticaron la solicitud del presidente de la República, Carlos Alvarado, de no comparecer en el Congreso, sino en Casa Presidencial, por la investigación del Caso UPAD.
La petición la realizó mediante una carta, Geannina Dinarte, ministra de la Presidencia, quien envió una carta a Eduardo Cruickshank, presidente de la Asamblea Legislativa, en la que solicita que el presidente de la República, Carlos Alvarado, comparezca en Casa Presidencial.
«De acuerdo a la costumbre de cortesía parlamentaria para con el presidente de la República y de respeto a la investidura Presidencial independientemente de quién la ejerza, ponemos a su disposición y la de los señores diputados y señoras diputadas, la Casa Presidencial para que este sea el recinto de la audiencia indicada. Esta costumbre tiene como antecedentes las comparecencias de los señores expresidentes José María Figueres Olsen y Luis Guillermo Solís Rivera, durante sus respectivos periodos constitucionales», señala la misiva.
La diputada liberacionista, Franggi Nicolás, aseguró que es incomprensible la actitud del Presidente y afirma que el mandatario debe explicar las dudas que tienen los congresistas y lo que realmente pasó en la UPAD.
Jonathan Prendas, diputado de Nueva República, aseguró que el Presidente quiere que «lo tratemos con consideración cuando él no consideró al pueblo y mandó a espiarlo sin el más mínimo remordimiento».
Esa petición, llena de descaro absoluto y siguiendo las enseñanzas de Luis Guillermo Solís con el Cementazo, es una absoluta falta de respeto para quien creyó que vivía en democracia y se encontró que vivíamos más bien en un autoritarismo foribundo.
¿Cómo va a pedir un trato diferente al justo, cuando fue injusto con el pueblo?… mucho cinismo. El respeto se lo debe él al primer Poder de la República.
El diputado Dragos Dolanescu aseguró que no procede que se solicite la cortesía parlamentaria para que la comparecencia se haga en Casa Presidencial (en su territorio). No hay ley que obligue a los diputados a ir donde el presidente a interrogarlo.