• Informes de la OMS advierten sobre menor atención médica a personas con consumo problemático de sustancias psicoactivas durante la pandemia

Agencia. El último informe de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) advirtió que la crisis por el covid-19 podría conducir a un aumento en el uso de drogas a nivel mundial, tal como sucedió en otras crisis económicas, como la de 2008. Desde entonces, se vio reflejado un aumento del uso de drogas “alarmante” durante la última década, con 269 millones de consumidores en todo el mundo en 2018, lo que representó un aumento del 30% en esa última década.

Además, Ghada Waly, directora ejecutiva de UNODC, dijo en un comunicado que “los grupos vulnerables y marginados, los jóvenes, las mujeres y los pobres pagan el precio del problema mundial de las drogas”. “La crisis de covid-19 y la recesión económica amenazan con agravar aún más los peligros de las drogas, cuando nuestros sistemas sociales y de salud han sido puestos al límite”, aseveró.

Por eso desde la ONU se instó a que los gobiernos no escatimen en presupuesto para prevenir el consumo y pidió a los países desarrollados (que concentran la mayor parte de consumidores) a ayudar a combatir el tráfico en los países pobres y a invertir en el tratamiento de patologías relacionadas con el uso de sustancias.

¿Cuánto impactó la pandemia en el consumo?

Todavía no hay una gran evidencia científica sobre nuevos patrones de consumo de drogas en pandemia, pero los primeros estudios arrojan distintas realidades al respecto. El Informe Europeo sobre Drogas 2020, constató que en ese continente se redujo el consumo de sustancias como la cocaína y el éxtasis, pero aumentó el del cannabis y las benzodiacepinas. En tanto, en Estados Unidos, estudios dieron cuenta de que se agravó el uso problemático de opioides (principalmente fentanilo), disparándose el número de sobredosis en la mayoría de los estados.

En América Latina, los especialistas toxicológicos esperan los resultados de la encuesta sobre patrones de consumo de sustancias psicoactivas durante la pandemia, que realizó la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (CICAD) de la Organización de los Estados Americanos (OEA). No obstante, ese organismo internacional ya emitió advertencias al respecto.

El secretario general de la OEA, Luis Almagro, lamentó, luego de la última reunión de la CICAD realizada en diciembre, que los planes y programas de los diferentes gobiernos para tratar el problema de las adicciones a las drogas se hayan visto limitados por la pandemia. Almagro señaló que el acceso a los programas de tratamiento y adicciones a las drogas “se ha visto limitado y se requiere de más coordinación, desarrollo, implementación de planes y programas de reducción de la oferta y de la demanda de drogas que contrarresten el impacto del narcotráfico y que apoyen a las personas y las familias afectadas”.

Un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) constató que el 30% de los países presentó dificultades en el acceso a medicamentos destinados a tratar trastornos ‎mentales, neurológicos y derivados del consumo de drogas.‎

En ese sentido, Almagro señaló que es “imprescindible” que los países continúen fortaleciendo las capacidades institucionales que promuevan y protejan la salud, la seguridad, los derechos humanos y el bienestar de las personas en la región. Resaltó la importancia de la actualización de la estrategia hemisférica sobre drogas de la CICAD con el desarrollo del plan de acción 2021-2025, “el documento de drogas más importante de la década” según Almagro, porque representa un compromiso político y presenta las directrices para que los países puedan hacer frente a los problemas de las drogas con una “respuesta integral y coordinada”.