• Industriales instaron a que ARESEP siga controlando los aumentos tarifarios de electricidad y combustibles

Redacción-La Cámara de Industrias de Costa Rica hizo un llamado a la ARESEP para que no permita que el ICE y RECOPE recurran a cualquier pretexto o portillo para solicitar constantes aumentos tarifarios y utilicen la ley para beneficio propio.

Para los industriales, estos monopolios estatales no pueden ser un fin en sí mismo, por el contrario, deben poner al consumidor y el bien común como prioridad.

“Como costarricenses no podemos darles a estas instituciones un cheque en blanco, que cobren lo que les da la gana y subvencionemos los costos de estos monopolios; un sistema de servicio al costo, tal y como está hoy definido, no incentiva la eficiencia, la austeridad, ni el desarrollo de nuestro país”, manifestó Enrique Egloff, Presidente de la CICR.

A su vez, los industriales solicitaron a los diputados que se priorice una reforma a la Ley 7593 de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos, para lo cual la CICR realizará una propuesta en el marco del Congreso de Energía y Ambiente 2021.

Egloff fue categórico en señalar, como parte de la raíz del problema, que RECOPE y el ICE aprendieron a usar la ley para su beneficio propio y ARESEP ha tenido que estar controlando los constantes aumentos tarifarios que solicitan estos monopolios.

“Si estas instituciones públicas no han sabido autoregularse, es hora de establecer una adecuada rectoría, y no le corresponde a ARESEP llenar este vacío”, agregó.

El Presidente de la CICR señaló que “por mucho tiempo estos monopolios han hecho lo que les plazca, ninguno de sus jerarcas se ha preguntado: ¿en qué afecta al país si un proyecto hidroeléctrico al final cuesta el doble de lo presupuestado?, ¿qué pasa si depreciamos el mismo proyecto en diez años, en lugar de en los años reales de su vida útil?, ¿qué repercusión tienen convenciones colectivas claramente abusivas y excesivas?, ¿se necesitaba o no una refinería de petróleo?, lo cual ha tenido un impacto negativo en la competitividad de las tarifas, elemento clave para la atracción y sostenibilidad de las empresas y la generación de empleo en el país”.

Para los industriales, el ejemplo más claro es cuando el ICE se negó por tantos años a utilizar las normas internacionales de información financiera (NIIF), y que actualmente sigue buscando portillos con el Ministerio de Hacienda para no implementar estas buenas prácticas en sus estados financieros.

“Cuando finalmente por ley y por exigencia de la ARESEP, a finales del año anterior, se les obligó a presentar su información usando las NIIF, ahora nos dicen que las tarifas definidas no les alcanza para cubrir sus costos, cuando lo correcto es decir, que las tarifas no les alcanza para cubrir sus  abusos, excesos, e irresponsabilidad de años; pues ya no hay más cheques en blanco de parte de los usuarios, nos resulta imposible seguir sufragando la ineficiencia, abusos, y convenciones colectivas”, finalizó Egloff.