- Rendir homenaje a familiares fallecidos se ha popularizado en Costa Rica y todo el mundo
Redacción – Una tradición muy mexicana, se celebra este 27 de octubre. El Día de Muertos para esas mascotas que nos acompañan del «más allá» y que regresan al mundo de los vivos para recibir sus ofrendas.
Aunque en Costa Rica no se conmemora la celebración de Día de Muertos como en México, es común que las familias costarricenses visiten a sus seres queridos en el cementerio y enciendan una vela en su honor.
Incluso, es una festividad que se ha popularizado en todo el mundo debido a su significado «no muere quien no se olvida».
Según la tradición mexicana, los gatos y perros son los primeros en visitar esos lugares donde fueron felices, pues le abren el camino a las almas que vienen a visitar a sus seres queridos.
Así que, si usted es de los que cree en este tipo de homenajes, prepare su altar y ofrendas para la llegada de sus queridos amigos de cuatro patas y colita.
Las mascotas ahora son parte fundamental de los hogares de Costa Rica y el mundo entero. Ese gato y perro amado, será recordado con mucho amor por parte de quienes hizo felices en la tierra. Muchas personas los consideran como familia y por ello, es válido despedirse y recordarlos frecuentemente.
¿Cómo hacer una ofrenda y un altar?
Puede personalizar el altar a su gusto, con una fotografía de su mascota. Eso sí, muchos creen que lo más importante para ellos es la ofrenda, pues saben que usted está pensando en ellos al momento de colocarlas. Se acostumbra que el altar sea muy colorido y lleno de velas.
En la tradición se incluye ponerles agua y alimento, así como premios tipo croquetas, sus juguetes y la cama para que «descansen» durante su visita.
Además, esa comida que le ofrece a su mascota durante la visita, puede llevarla donde haya perros y gatos callejeros o rescatados.
Si usted se cambió de casa, eso no es problema. Según la creencia, al igual que las almas de sus seres queridos que le visitarán el 2 de noviembre, las mascotas sabrán dónde encontrarlo y visitarán moviendo su colita y olfateando como lo hacían en vida.
No es casualidad que esta celebración sea el 1 y 2 de noviembre, cuando también se festeja el Día de Todos los Santos y el Día de los Difuntos en el catolicismo.
