Chacón defendió su gestión ante críticas de diputados por supuesto mal manejo del Covid en el país.
Redacción: Juan José Romero, epidemiólogo de la Universidad Nacional (UNA), aseguró que la ministra de Salud Joselyn Chacón se mostró técnicamente muy débil, deficiente y, a ratos, ignorante en aspectos que deben ser de absoluto conocimiento por el cargo que ostenta.
Asimismo, indicó que durante la presentación de la jerarca de Salud varios de los datos presentados carecieron de evidencia científica dura y muchos argumentos, lejos de ser fiables eran más bien friables, inconsistentes, nada robustos.
“Ni qué decir de indicadores o hechos que se atribuyó a sí misma o al gobierno al cual pertenece, pero que no son, para nada, producto de su gestión o de este gobierno; tal es el caso de las aperturas totales de los centros educativos o de la apertura del sector comercial”, comentó el especialista.
Resaltó que algunos diputados, al igual que la ministra, no hicieron su tarea a conciencia de estudiar con ciencia.
“En sus intervenciones se mostró ayuna de conceptos claros, datos robustos y en vez de no dejar interrogantes en sus interlocutores; más bien creó y acrecentó las dudas y le echó gasolina al fuego”, comentó Romero.
El epidemiólogo subrayó que la jerarca de Salud tampoco pudo demostrar, con datos duros, la pertinencia de eliminar el uso de las mascarillas en espacios interiores, así como la vacunación obligatoria contra la covid-19 en personal de salud y en menores de edad.
Finalmente, apuntó que en ningún momento Chacón explicó por qué ella y el gobierno actual, eliminaron, vía decreto, otros preceptos que buscaban la protección de la salud de las personas, en especial los menores.
“Lamentablemente demostró que desconoce bajo cuáles criterios se debe obligar a la aplicación de una vacuna. En este aspecto, sí hay que poner mucha atención, porque el deber del gobierno de la República es, tal y como lo dice la Ley General de Salud N°5395, en su primer artículo: La salud de la población es un bien de interés público tutelado por el Estado”, y en su artículo segundo remacha en su primera frase: Es función esencial del Estado velar por la salud de la población. Corresponde al Poder Ejecutivo por medio del Ministerio de Salubridad Pública…, la definición de la política nacional de salud…”, concluyó Romero.