Foto: Fin ilustrativo
  • Los reos permanecerán en celdas de concreto, encerradas con gruesos barrotes de acero reforzado y no tendrán acceso a colchonetas para dormir.
Redacción: Nayib Bukele, presidente de El Salvador, anunció el traslado de un segundo grupo de 2 mil supuestos pandilleros presos bajo fuertes medidas de seguridad a la cárcel «más grande de América».
«En un nuevo operativo, trasladamos al segundo grupo de 2.000 pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot). Con esto, ya son 4.000 pandilleros los que habitan la cárcel más criticada del mundo», escribió Bukele en Twitter.
La megacárcel, con capacidad para 40.000 presos, tiene un severo régimen de reclusión que ha sido denunciado por organismos de derechos humanos.
Entre los presos trasladados al Cecot este miércoles, según un comunicado de la presidencia, figura un «ranflero histórico (dirigente fundador), 57 ranfleros nacionales, 33 mandos de diferente categoría, 43 «gatilleros» y 1.866 «homeboys».
El mandatario divulgó imágenes del traslado, que se inició en la madrugada, desde el penal de Izalco hasta la megacárcel ubicada en un área rural de Tecoluca, unos 74 km al sureste de San Salvador.
Tras la situación el ministro de la Defensa, René Francis Merino, informó que 1.200 militares brindaron seguridad en tierra durante el traslado, que fue seguido desde el aire por tres helicópteros de la Fuerza Aérea.
Los primeros 2.000 pandilleros habían sido llevados al Cecot el 24 de febrero.
La cárcel con  alta tecnología para la vigilancia,  fue inaugurada a principios de febrero por el propio Bukele.
Seguridad máxima
Los reos permanecerán en celdas de concreto, encerradas con gruesos barrotes de acero reforzado y no tendrán acceso a colchonetas para dormir.
Para evitar fugas, la prisión cuenta con varios anillos de seguridad, una cerca electrificada con 15.000 voltios y custodios penitenciarios, soldados y policías que controlarán el perímetro a través de 19 torres de vigilancia. Además 50 miembros de la Policía Nacional Civil apoyará de manera permanente las requisas.