Por Walter Sánchez Vila
ACI Prensa- La abogada e investigadora Martha Patricia Molina denunció que la policía de la dictadura de Nicaragua irrumpió en un convento y secuestró a un grupo de religiosas.
La autora del informe “Nicaragua, ¿una Iglesia perseguida?”, que da cuenta de más de 500 ataques de la dictadura de Daniel Ortega contra los católicos en el país, realizó la denuncia el domingo 2 de julio.
Los miembros de la policía sandinista irrumpieron “como delincuentes a medianoche de ayer a la casa de las Hermanas de la Fraternidad Pobres de Jesucristo; ellas iban a dejar el país próximamente. Se las llevaron con rumbo desconocido. No sabemos nada de ellas”, escribió Molina en su cuenta de Twitter.
“Espero respeten su vida y su integridad. Algunos guardias se quedaron en la casa donde ellas habitaban. #iglesiaperseguidani”, agregó.
Consultada por ACI Prensa este lunes 3 de julio, Martha Patricia Molina precisó que por ahora sólo se sabe lo que ha compartido en sus redes sociales y que “ya están en un lugar seguro en un país fuera de Nicaragua”.
De acuerdo al medio nicaragüense Artículo 66, las religiosas iban a dejar Nicaragua la próxima semana, ya que las autoridades no les habían renovado el permiso para quedarse en el país.
Más en América
Las Hermanas de la Fraternidad Pobres de Jesucristo llegaron a Nicaragua en 2016 procedentes de Brasil, donde fueron fundadas por el sacerdote Gilson Sobreiro. También están presentes en países como Costa Rica, Guatemala y El Salvador.
Este nuevo ataque de la dictadura de Ortega en contra de religiosas ocurre un año después de la expulsión de un grupo de Misioneras de la Caridad, la congregación fundada por la Madre Teresa de Calcuta, que luego fueron acogidas en la Diócesis de Tilarán-Liberia, en Costa Rica.