El vaticano reafirma que el sacramento es entre un hombre y una mujer, pero aclara que las bendiciones «no deben denegarse».
Redacción: El Vaticano anunció este lunes, por primera vez en un documento oficial la bendición de parejas del mismo sexo y “en situaciones irregulares” para la Iglesia católica, manteniéndose no obstante firme en su oposición al matrimonio homosexual.
“Se puede entender la posibilidad de bendecir a las parejas en situaciones irregulares y a las parejas del mismo sexo, sin convalidar oficialmente su ‘status’ ni alterar en modo alguno la enseñanza perenne de la Iglesia sobre el Matrimonio”, se lee en el documento, aprobado por el papa Francisco, de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
No obstante, precisa, “esta bendición nunca se realizará al mismo tiempo que los ritos civiles de unión, ni tampoco en conexión con ellos. Ni siquiera con las vestimentas, gestos o palabras propias de un matrimonio”.
De acuerdo con el Vaticano, una reflexión que, según explica, “supone un verdadero desarrollo respecto a lo dicho hasta ahora sobre las bendiciones”, llegando a incluir la posibilidad “de bendecir a parejas en situación irregular y a parejas del mismo sexo, sin validar oficialmente su estatus ni modificar en nada la enseñanza perenne de la Iglesia sobre el matrimonio”.
Esta posibilidad supone un cambio de postura respecto a la que la Congregación publicó en marzo de 2021, dirigida entonces por el español Luis Ladaria Ferrer, y que dijo que la Iglesia católica no podía impartir su bendición a las uniones de personas del mismo sexo.
“En su misterio de amor, a través de Cristo, Dios comunica a su Iglesia el poder de bendecir. Concedida por Dios al ser humano y otorgada por estos al prójimo, la bendición se transforma en inclusión, solidaridad y pacificación. Es un mensaje positivo de consuelo, atención y aliento”, se lee en el texto.
“No se debe ni promover ni prever un ritual para las bendiciones de parejas en una situación irregular, pero no se debe tampoco impedir o prohibir la cercanía de la Iglesia a cada situación en la que se pida la ayuda de Dios a través de una simple bendición”, sentencia la Doctrina de la Fe en su “Declaración”.
El nuevo documento reafirma que el matrimonio es un sacramento para toda la vida entre un hombre y una mujer. Además, se reitera que, según la “perenne doctrina católica”, solo se consideran lícitas las relaciones sexuales dentro del matrimonio entre un hombre y una mujer.