- El ingenio del crimen sigue evolucionando, pero la Policía Penitenciaria también. Un dron lanzó un zapato lleno de ilícitos en la prisión de Limón, pero los oficiales lo interceptaron a tiempo.
El hampa no descansa y ahora usa tecnología de punta para burlar la seguridad de las cárceles. En el centro penal de Limón, la Policía Penitenciaria detectó un dron que sobrevolaba la zona y dejó caer un zapato tenis gris.
Lo que parecía un simple calzado escondía una carga nada convencional: dos celulares, un chip, casi 120 gramos de marihuana y hasta anzuelos unidos con cuerda de nylon.
Los oficiales reaccionaron de inmediato y activaron los protocolos de seguridad, logrando recuperar el paquete antes de que llegara a manos de los reclusos.
Pero esta no fue la única artimaña detectada en los últimos días. En el centro penitenciario 26 de Julio, en Puntarenas, los guardias observaron el lanzamiento de un objeto desde el exterior del penal.
Al revisarlo, encontraron envoltorios con aparente marihuana y cocaína.
Mientras tanto, en la cárcel Jorge Arturo Montero, en San Rafael de Alajuela, se descubrió que algunos visitantes intentaban ingresar droga y celulares escondidos en sus partes íntimas. Un hombre incluso llevaba 115 gramos de marihuana de esa forma.
Las autoridades insisten en que reforzarán la vigilancia para frenar estas estrategias cada vez más sofisticadas. Aunque los criminales innovan, la Policía Penitenciaria sigue atenta para frustrar sus intentos.
