Redacción. Los integrantes de la Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP) evidenciaron que el tope máximo que se estableció para la tasa de usura sigue siendo alto en 39%, pero que pese a esto la iniciativa debe aprobarse con urgencia.
«Queda en evidencia que falta mucho camino por recorrer en tal sentido y que el tema debe seguir pendiente en una agenda socioeconómica que persiga la reducción de las desigualdades y mayor integración con justicia social», destacó Albino Vargas, secretario general de la ANEP.
Los diputados le dieron a la iniciativa un trámite rápido ayer con el propósito de que sea aprobado como parte del paquete urgente que solicitó el Gobierno en el marco del Covid-19.
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Esta iniciativa la propuso el diputado del PAC, Welmer Ramos y del PLN, David Gourzong, y firmada por 30 legisladores y cuenta con una metodología de consenso aprobada por los diputados de la Comisión de Hacendarios que fijaría una tasa máxima en la actualidad del 39% a todos los intereses (incluyendo las tarjetas de crédito).
Con dichos parámetros se podría aplicar el artículo 243 del Código Penal, el cual castiga la usura.
Además, la tasa acordada para créditos de consumo y tarjetas de crédito sería menor a la que sugirieron en su momento el Banco Central con un 57% y la Sugef con un 45%.
Ramos indicó que «en Costa Rica hay algunos que siguen queriendo aprovecharse de la calamidad de miles de costarricenses capitalizando sus deudas a tasas de interés todavía excesivas. Todas las tasas de interés deben bajar en Costa Rica y, más aún, en este momento, cuando la gente necesita créditos con tasas de interés justas que les permita sobrevivir y salir adelante».
